Análisis Ley 1454 De 2011
Páginas: 17 (4136 palabras)
Publicado: 30 de mayo de 2012
Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial: ¿Un olvido más del carácter multiétnico y pluricultural de Colombia?
Por: Gabriel Tobón Quintero
El pasado 28 de junio del presente año fue sancionada la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial por el presidente Juan Manuel Santos, la Ley 1454 del 28 de junio de 2011, con más pena que gloria, y sin el acostumbrado despliegue, información ypublicidad a través de los medios radiales, escritos, televisivos o virtuales para el conjunto de la población urbana y rural de Colombia.
En los pasillos del Palacio de Nariño, el Presidente y su Ministro de Gobierno, no ocultaban su entusiasmo injustificado; el primero, al sancionarla declaró ante los medios que esta la ley era "…otro hecho histórico: después de diecinueve intentos fue aprobadala Ley de Ordenamiento Territorial”, razón por la que felicitaba al Congreso.
Catorce días antes de tan “trascendental” hecho, fecha en la que el Senado aprobó la ley, Germán Vargas Lleras dijo:
Creo que también hoy es un día histórico. Después de veinte años y veinte iniciativas que habían sido negadas, se aprobó hoy en último debate la Ley de Ordenamiento Territorial que crea los Fondosde Inversión Regional y también las zonas especiales. La Ley permitirá fomentar alianzas estratégicas de entidades territoriales, o sea, entre los municipios. También esta ley avanza en los proyectos de áreas metropolitanas (Revista Semana, 2011).
La Ley está compuesta apenas por cuarenta artículos, agrupados bajo cinco títulos como sigue: el primero se refiere a las disposiciones generales;el segundo, se ocupa del marco institucional; el tercero de las competencias territoriales; el cuarto de las regiones administrativas y de planificación; y el quinto, contiene las consideraciones.Con estos títulos no logra satisfacer las expectativas que desde hace veinte años tenemos amplios sectores de población, regiones, asociaciones de municipios, académicos, organizaciones nogubernamentales y comunitarias, autoridades étnico-territoriales, y especialmente, las organizaciones indígenas, afrodescendientes y campesinas.
En efecto, los sectores antes mencionados, esperábamos una ley que ampliara y profundizara los avances de la Constitución Política de 1991 en materia de ordenamiento territorial, que superara los vacíos y limitaciones de la Ley 388/1997 sobre desarrollo yordenamiento territorial, pero particularmente, que se ocupara de dos asuntostrascendentales:
Uno, que sacara la descentralización fiscal y administrativa del país del profundo agujero negro en que la tiene sumida el centralismo campante de los anteriores gobiernos hasta el actual.Y dos, que reconociera y en efecto otorgara mayores y más amplios niveles de autonomía territorial a los municipios, lasregiones, los territorios indígenas y afrodescendientes, y que por primera vez, sentara las bases para el reconocimiento de la autonomía de los campesinos que tantas luchas han adelantado por conseguirla.
Una de las preguntas, entre otras, que nos hemos hecho desde el Observatorio para el boletín de este mes, es la siguiente: ¿cómo quedan los pobladores afrodescendientes en la Ley Orgánica deOrdenamiento Territorial?
Después de leer y releer el texto de la mencionada Ley, no podemos más que expresar públicamente la más profunda decepción por el insuficiente tratamiento a la poblaciónafrodescendiente.Ésta se encuentra casi invisibilizadapor la norma y lo más grave aún, no se establece consideración alguna sobre la ampliación de la necesaria autonomía que debe tener sobre losterritorios colectivos que ha ocupado ancestralmente, o sobre aquellos de los que ha sido despojada, o sobre la eliminación de las trabas y trámites, procedimientos burocráticos y exigencias para que pueda constituir sus consejos comunitarios, sus formas de organización y control autónomo del territorio.
En este sentido, la Ley, en el título primero sobre las disposiciones generales, sólo hace...
Por: Gabriel Tobón Quintero
El pasado 28 de junio del presente año fue sancionada la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial por el presidente Juan Manuel Santos, la Ley 1454 del 28 de junio de 2011, con más pena que gloria, y sin el acostumbrado despliegue, información ypublicidad a través de los medios radiales, escritos, televisivos o virtuales para el conjunto de la población urbana y rural de Colombia.
En los pasillos del Palacio de Nariño, el Presidente y su Ministro de Gobierno, no ocultaban su entusiasmo injustificado; el primero, al sancionarla declaró ante los medios que esta la ley era "…otro hecho histórico: después de diecinueve intentos fue aprobadala Ley de Ordenamiento Territorial”, razón por la que felicitaba al Congreso.
Catorce días antes de tan “trascendental” hecho, fecha en la que el Senado aprobó la ley, Germán Vargas Lleras dijo:
Creo que también hoy es un día histórico. Después de veinte años y veinte iniciativas que habían sido negadas, se aprobó hoy en último debate la Ley de Ordenamiento Territorial que crea los Fondosde Inversión Regional y también las zonas especiales. La Ley permitirá fomentar alianzas estratégicas de entidades territoriales, o sea, entre los municipios. También esta ley avanza en los proyectos de áreas metropolitanas (Revista Semana, 2011).
La Ley está compuesta apenas por cuarenta artículos, agrupados bajo cinco títulos como sigue: el primero se refiere a las disposiciones generales;el segundo, se ocupa del marco institucional; el tercero de las competencias territoriales; el cuarto de las regiones administrativas y de planificación; y el quinto, contiene las consideraciones.Con estos títulos no logra satisfacer las expectativas que desde hace veinte años tenemos amplios sectores de población, regiones, asociaciones de municipios, académicos, organizaciones nogubernamentales y comunitarias, autoridades étnico-territoriales, y especialmente, las organizaciones indígenas, afrodescendientes y campesinas.
En efecto, los sectores antes mencionados, esperábamos una ley que ampliara y profundizara los avances de la Constitución Política de 1991 en materia de ordenamiento territorial, que superara los vacíos y limitaciones de la Ley 388/1997 sobre desarrollo yordenamiento territorial, pero particularmente, que se ocupara de dos asuntostrascendentales:
Uno, que sacara la descentralización fiscal y administrativa del país del profundo agujero negro en que la tiene sumida el centralismo campante de los anteriores gobiernos hasta el actual.Y dos, que reconociera y en efecto otorgara mayores y más amplios niveles de autonomía territorial a los municipios, lasregiones, los territorios indígenas y afrodescendientes, y que por primera vez, sentara las bases para el reconocimiento de la autonomía de los campesinos que tantas luchas han adelantado por conseguirla.
Una de las preguntas, entre otras, que nos hemos hecho desde el Observatorio para el boletín de este mes, es la siguiente: ¿cómo quedan los pobladores afrodescendientes en la Ley Orgánica deOrdenamiento Territorial?
Después de leer y releer el texto de la mencionada Ley, no podemos más que expresar públicamente la más profunda decepción por el insuficiente tratamiento a la poblaciónafrodescendiente.Ésta se encuentra casi invisibilizadapor la norma y lo más grave aún, no se establece consideración alguna sobre la ampliación de la necesaria autonomía que debe tener sobre losterritorios colectivos que ha ocupado ancestralmente, o sobre aquellos de los que ha sido despojada, o sobre la eliminación de las trabas y trámites, procedimientos burocráticos y exigencias para que pueda constituir sus consejos comunitarios, sus formas de organización y control autónomo del territorio.
En este sentido, la Ley, en el título primero sobre las disposiciones generales, sólo hace...
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