Analisis de caso desde el punto de vista de Enfermería legal



ANÁLISIS DE CASO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA ENFERMERÍA LEGAL

EN MEMORIA DE NICOLAS (UN RELATO DE VIDA)
Prof. Lic. Gareca Carmen.

Don Nicolás Pellegrino, de una salud inquebrantable pasó la mayor parte de su vida en el campo en medio del ocre- verde de la vegetación, y el graznido agudo de las aves. El ir y venir por la tierra entre sembradíos y cosechas se marcaron en sus manossecas y marchitas. Allí estuvo, viendo crecer a su hijo adoptivo o de “crianza” como le decían sus vecinos, hasta la muerte de Ana, su mujer, cuando éste se marcho hacia nuevos rumbos. Como decía Nicolás “ los hijos son de la vida, ellos buscan su destino..”
El paso del tiempo le cayó en su cuerpo de 74 años, por lo que debió despojarse de sus pocas pertenencias para vivir con su hijo, en unlugar que no era el suyo, pero que compensaba la triste soledad de sus días de campo con la alegría de estar cerca de sus nietos.
La inestabilidad en la marcha en los nuevos caminos de piedra y cemento ocasionaron lo esperado: una caída con la consiguiente fractura de la cadera derecha. Asistido en el hospital de la ciudad fue internado e intervenido quirúrgicamente, ¡que nueva experiencia le habíadeparado el destino!, encontrarse en un lugar desconocido donde todos estaban apurados como para poder explicarle lo que le había pasado. En su internación su rudeza de hombre de campo, su resistencia al sufrimiento le permitieron superar estoicamente el embate de la inmovilización e invasión de su cuerpo.
Regresó a su casa luego de quince días de ver como el tiempo lentamente transcurríaentre las paredes vacías del hospital.
Los cuidados escasos y poco eficientes en su hogar, fueron determinantes para una evolución poco favorable, con 10 kilos menos de peso y siete días de postoperatorio un nuevo mal se apropió de Nicolás, una obstrucción intestinal.
En un banco de la guardia, por donde ingresó para ser atendido, esperaba mientras su caso era “analizado” si calificaba comourgente. Los residentes que lo atendieron se mostraron contentos ya que el “viejo” era un nuevo cuerpo para experimentar, examinar y realizar técnicas médicas –quirúrgicas. Se ocupan de mí pensaba, pero le pareció extraño que las urgencias que “hablaban” eran las que más llamaban la atención de los enfermeros, Nicolás ya no tenía voz.
Trataba de acomodar sus viejos huesos operados, en la camillarígida, lugar que se transformó en el aposento donde por tres días toleró la máscara de oxígeno, los exámenes físicos, las sondas, y los pinchazos, mientras le era difícil respirar con la presión que el abdomen le producía, en la posición de acostado.
Al fin, le dijeron que tenía un abdomen agudo, que lo operarían para evitar un agravamiento del cuadro, nadie estaba para que hablara por él, yNicolás pensó que sería lo mejor, aún cuando se le dificultaba estar conciente, alerta a una realidad que lo ahogaba y lo aislaba cada vez más del entorno.
La disminución de peso denotaba una hipoproteinemia y un estado de desnutrición, que ponían en riesgo su vida, lo operaron, y por su estado crítico fue trasladado a UTI, con una colostomia; drenajes en su abdomen, sonda en la nariz, catéteres ensus brazos, allí comenzó el triste recorrido de un camino, que seguramente él pensaba sería para mejorar. Conectado a un monitor, con un tubo en su garganta y otros aparatos en su cuerpo le era difícil poder decir lo que le pasaba, lo que sentía, lo que quería.
Su estancia en la UTI, fue progresivamente prolongándose, “mas de lo debido”, pensaría quizás algún terapista ávido de una cama paraun nuevo paciente. Una evisceración irrumpió en las débiles paredes de su enflaquecido abdomen, esta nueva complicación presagiaba en Nicolás un presunto y trágico final.
El ir y venir de los enfermeros para mantener las condiciones básicas de confort y el sostén tecnológico hacia que el paciente sumara trabajo, a decir del jefe del servicio: “pero como se les ocurrió a los cirujanos...