Analisis

La presidenta Cristina Fernández envío el lunes al Congreso un proyecto de reforma del Poder Judicial que tiene por objetivo "modernizar y transparentar el poder más importante", pero cuyo verdaderopropósito, según la oposición, es limitar la independencia de los jueces.Fernández dijo en un acto en Casa de Gobierno que el proyecto de "ley de la democratización de la justicia" que debatirá elparlamento "no implica que lo tratemos de antidemocrático (pero) el Poder Judicial actual es producto de una larga y dolorosa mala historia que hemos tenido los argentinos en materia institucional"."Senecesita una mayor democratización para dar una legitimación al poder más importante... es el último lugar donde se decide la vida, la libertad y el patrimonio de los 40 millones de argentinos",sostuvo la mandataria en el acto oficial que contó con la presencia de miembros de la Corte Suprema de Justicia y otros funcionarios judiciales.Los líderes de la oposición rechazaron la invitación de lapresidenta a participar de la ceremonia por considerar que la iniciativa esconde la intención de domesticar a los jueces en momentos en que varios funcionarios están en la mira de la justicia pordenuncias de corrupción, mientras todavía deben resolverse en ámbito judicial causas que tienen especial interés para el gobierno como la demorada reglamentación de una ley de medios de comunicaciónaudiovisual.El diputado del peronismo disidente Alberto Asseff dijo que "el anuncio esconde el nocivo objetivo de domesticar a la justicia".La reforma impulsada por Fernández incluye la elección a través delvoto popular de los miembros del Consejo de Magistratura, encargado de la designación y remoción de jueces. Este organismo tiene actualmente 13 miembros, entre ellos jueces, abogados ylegisladores.El proyecto oficial propone elevar a 19 los integrantes del consejo, los cuales vendrán del mundo académico.Si la iniciativa es aprobada por el Congreso, el gobierno aspira a que los nuevos miembros...