Angeles y demonios
conjunto de motivaciones y directrices que favorezcan la imaginación y la creatividad y que empujen a los alumnos adescubrir el placer de aprender a hacer cosas y de alcanzar nuevos horizontes.
Desde nuestro punto de vista, el ocio no es un lujo sino un derecho de todos los ciudadanos. La propia Constitución(artículo 43) obliga a los poderes públicos a fomentar la Educación Física y el Deporte y a facilitar la adecuada utilización del ocio. Por tanto, los esfuerzos de las Administraciones públicas, en estesentido, siendo loables, no son otra cosa que el cumplimiento del mandato constitucional.
Existe una dimensión estrictamente individual del ocio, que no es en absoluto desdeñable, pero el ocio vivido comoun proyecto de realización personal invita a la comunicación y a la convivencia e, incluso, a un compromiso con ideales de creación y de extensión cultural.
El ocio es una actividad, una inversiónen nosotros mismos, en nuestra sensibilidad, en nuestro afán de conocimiento, en nuestra búsqueda de perfección, en nuestra capacidad de disfrutar con lo que nos conmueve, nos cautiva o favorecenuestra realización.
7.
En esta tarea de aprendizaje deben intervenir la Familia, la Escuela y las Administraciones públicas, así como Organizaciones No Gubernamentales y, por supuesto, la propiaPersona.
A la hora de abordar en Escuelas de Padres y Madres la Educación para el Ocio, deberíamos marcarnos, como mínimo, los siguientes OBJETIVOS
1. Apostar, decididamente, por un concepto...
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