Anonimo Coleccion
CUENTOS TAN CORTOS
(Colección de microcuentos y cuentos cortos)
...tan cortos como suspiros,
como el inicio de un gesto,
como la insinuación de una sonrisa,
como el primer instante de un sueño.
Seré breve.
Breve como las palabras no pronunciadas,
como las miradas de entendimiento entre dos cómplices,
como la caricia de ánimo
o el beso en la mejilla.
Breve como los cuentos que cabenen una mano
o los que desaparecen en la segunda hoja.
El Don Juan
La besó muchas veces esperando una respuesta que no logró. Después usó cientos de palabras, ya hermosas, ya desgarradas, invocando un amor sublime, mas nada consiguió tampoco. Por fin, la miró con enorme ternura, pero ella continuó ignorando todas sus artes. Derrotado, el conquistador se fue triste. Y cuando ya habíacomenzado a olvidarla, pero aún la frustración le dolía, descubrió que lo que de verdad había amado en ella era su silencio, y eso lo había obtenido. Dio así por bien empleada la aventura y la olvidó del todo.
Mirada
Levantó su copa hasta la altura de los ojos, y miró a través de la parte del vidrio que no contenía el vino rojo. Vio deformados, grotescamente, al resto de los comensales, que también leobservaban serios y expectantes. Todos menos uno. Ella miraba en otra dirección y sonreía.
Solo
Andrés despertó notando una ansiedad extrema que le obligaba a un respirar entrecortado. Buscó a su lado en la cama, y el hueco frío de lo que debería de haber sido Rosa, su compañera, le llevó al desasosiego y el grito.
-¡Rosa!
Hacia abajo
La abrazó desde atrás por la cintura, y ella no opusoresistencia, más a contrario, cogió las manos del hombre y empujó de ellas hacia abajo.
Tiempo
Miró a su mujer como si fuese la primera vez que la veía. Tras una duda momentánea, le pregunto: "¿Eres tú quien ha cambiado o he sido yo?.
Cazador
Cogió con sus dos manos la pesada piedra; sostenerla requería tal esfuerzo que no serviría para arrojarla muy lejos, aún así la mantuvo en sus manos a laespera de la bestia. Cuando el animal llegó, lo que supuso un mayor esfuerzo fue ignorar el dolor de sus ojos.
Ilusión
Gritó su nombre, pero ella no se volvió; siguió su camino, aunque otros viandantes sí giraron la cabeza sorprendidos por la exclamación. Entonces él corrió hasta alcanzarla, y cuando llegó a su altura, intentó asirla por un brazo, pero su mano no topó más que con un airecálido, no sujetó más que el vacío, atravesó limpiamente la aparente figura que vagaba por la calle.
Indiferencia
Ella le dijo: "Mírame, por favor". El siguió acostado y fumando con los párpados caídos. Cuando la puerta se cerró tras la mujer, abrió los ojos y expulsó lentamente, con indiferente suavidad, el humo de sus pulmones.
Mal día
El camarero le sirvió con desdén. El señor que estaba asu lado le miró de reojo sin ocultar un gesto de malestar. Antes, al entrar, un niño le había dado una débil patada. Este hombre triste tomaba su amargo café en el mostrador de una cafetería rodeado por un mundo hostil.
Soñando quizás
Se hallaba perdido, y preguntó al primero con el que se cruzó dónde estaba. Resultó que se encontraba en una ciudad a la que no recordaba haber llegado nunca,por lo que supuso que soñaba y no le dio mayor importancia.
Caderas
Él la miró intensamente en silencio. Creyó que eso sería suficiente. Cuando ella se fue, sola y con paso lento, el hombre adivinó una insinuación en el movimiento de sus caderas.
El soldado
El soldado en la batalla cayó herido sobre la hierba ya húmeda de tanta sangre. Caído, y sin poder levantarse, pensó por qué y por quiénperdía la vida, y en ello no halló justificación a su muerte. Por eso, cuando le fueron a rematar, oyeron que gritaba: "¿Qué hago yo aquí?"
Libro
Leía un libro comprado al azar. Hacia la mitad de la lectura descubrió su nombre y la descripción de un personaje exactamente igual a él mismo.
Tiempo comprado
Ella se alisó la falda con las manos, a continuación ajustó la blusa, metiendo la...
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