Anonimo

JACKFORCE

Cierto día de otoño Claudia, de once años, y su tío Andrés (biólogo) tuvieron que ir al bosque a estudiar varios tipos de animales. No vieron todos los que esperaban; solo divisaron aun pájaro carpintero, dos ardillas, un castor construyendo su casa con troncos en un río y a un ciervo. Pero la sorpresa más grande que se llevaron fue cuando Claudia dijo:

- ¡Mira, tío! ¿Quées esto? Parece un huevo…, pero ¿de qué?
- Yo creo que es un huevo de dinosaurio –dijo Andrés-
- Por favor, tío, ¿me lo puedo llevar?
- Bueno… ejem… si tú quieres. Pero lo tendrásque cuidar.
- Te lo prometo, tío. –y Claudia le dio un abrazo, mientras con cuidado depositaba el huevo en una bolsa.

Cuando llegaron a casa, depositaron el huevo en una caja dezapatos. No sabían muy bien qué hacer con él, porque nunca habían cuidado algo así. ¡Parecía tan delicado!.
Estuvieron una semana dándole calor con una bombilla, hasta que una tarde el bebé comenzóa romper poco a poco el cascarón. Era viernes. Al salir se dieron cuenta de que era un dinosaurio muy pequeñín y muy mono. Era verde, suave, ojos negros y con nariz de pato. Comprobaron que erainofensivo.
Como era fin de semana Claudia estuvo mimando al bebé. Decidió llamarle Jackforce, ya que pensó que iba a ser muy fuerte porque ya quería andar. Le hizo un biberón y se lo tomaba todo.El lunes Claudia tuvo que volver al colegio y su tío Andrés a trabajar. Mientras Jackforce se quedó solo dormido. Al lado tenía el biberón. Lo tomó y con gran energía comenzó a dar sus primerospasos y decidió inspeccionar el entorno.
Primero, miró el baño, cogió algo gelatinoso (gel) con sus patas y lo destapó, agarró una esponja y derramó todo el gel impresionado por el olor.Resbalándose consiguió salir del baño y sus pasos se dirigieron a la habitación de Claudia, sus ojos se abrieron como platos al ver tantos muñecos. Sin pensarlo dos veces se sumergió entre ellos, los olió,...