Anti Dogmatismo

ESTUDIOS y NOTAS

ANTIDOGMATISMO, APERTURA
E INTERDEPENDENCIA
(CAMBIO EN LA PERSPECTIVA Y EL HORIZONTE CIENTÍFICOS)

Desde hace ya bastantes años, se ha ido acentuando en nuestra forma de
enfocar la realidad política, el punto de vista histórico y, dentro de él, un
más específico sentido «histérico-estructural».
Ya en 1948, publicamos en la revista Arbor (febrero, 1948, núm. 26, páginas185 a 214) un trabajo titulado «La dialéctica del mundo político romano», en el que estudiábamos la estructura del mundo romano, en su estática y en su dinámica, en su orden estructural y también en sus coyunturas
de desestructuración o reestructuración y, por último, en su decadencia para
dar paso a nuevas estructuras históricas en el mundo occidental y en el
oriental.
Otros varios trabajosen sentido similar o semejante, desarrollados en artículos de revistas (por ejemplo, en los números 68, 74 y 75 de la Revista de
la Facultad de Derecho, de la Universidad de Oviedo, de los años 1954
y 1955); diversos cursos monográficos del Doctorado, en las Universidades
de La Laguna y Barcelona desde los cursos de 1948 y i 949, hasta este
curso académico de 1963,64, desarrollados sobre temashistérico-políticos o
sobre problemas sistemáticos de las relaciones entre sociología e historia, nue*
vos métodos en la Ciencia Política, e tc.; la publicación iniciada de nuestros
apuntes de Cátedra en la Universidad de Barcelona, sobre «Historia y es*
tructura de las sociedades políticas», en 1955, y los programas de primero y
segundo curso de la asignatura de Derecho político, orientadosen este sentido ya claramente desde 1 954; así como gran número de seminarios, clases
prácticas y conferencias sobre temas sociales, económicos y políticos, desarrollados bajo la bandera de un «historicismo» —valga la polivalente expresión—
cada día más acentuado, son clara muestra de nuestra posición actual en el
estudio de la Ciencia Política.
No es ciertamente una postura extraña nioriginal, pues un grupo muy
numeroso de estudiosos de Ciencia Política, se inclina en la actualidad hacia

JOSÉ M. a H ERNANDEZ-RUBIO CISNEROS

esa dirección o enfoque, tanto en el extranjero, como en España, pero sí es
necesario establecer estos antecedentes, por nuestra parte, para aclarar inicialmente nuestro punto de partida y, posteriormente, gran número de nuestras
conclusiones.
Justamenteesta posición, vamos a llamarla historicista, nos ha llevado
«n los últimos tiempos a un replanteo de nuestras posiciones teóricas pasadas, y a un examen profundo de las bases en que nuestra posición actual podría apoyarse.
Especialmente el estudio de las grandes construcciones filosoficopolíticas,
filosoficosociales y filosoficohistóricas al mismo tiempo de tres grandes pensadores delochocientos: Comte. Hegel y Marx; construcciones grandiosas pero, al mismo tiempo, enormemente parciales la de cada autor de los citados
en un sentido concreto y definido; parcialidad y hasta simplicidad —si cabe
emplear esta palabra que puede envolver una crítica peyorativa que no está
en nuestro pensar—, que les ha llevado a deformar la auténtica realidad, especialmente y en sentido opuesto a Hegely a Marx, nos llevó al estudio de
los supuestos y hasta de los presupuestos —de los cuales no lograban escapar,
en gran parte, aunque no en toda su construcción— de estas construcciones.
En un curso del Doctorado en Derecho desarrollado en el año académico
I 9 6 I - I 9 6 2 , bajo el título de «El marxismo, teoría y realidad burguesa», estudiamos los supuestos teóricos del marxismo en elracionalismo-naturaüsta de los siglos xvín y XIX, así como su engarce burgués en perspectiva y
horizonte.
Pero especialmente nos dimos cuenta de lo que el positivismo de Auguste
Comte y el materialismo dialéctico, con su muy claro matiz de materialismo
económico y ambos grandes pensadores con muy claras muestras y manifestaciones del dogmatismo de la Ciencia natural exacta de todo el ochocien'...