antologia poetica

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
ESCUELA NACIONAL COLEGIO DE CIENCIAS Y HUMANIDADES
PLANTEL SUR
Taller De Lectura y Redacción e Iniciación a la Investigación Documental I


Antología poética.
¡Crisis!, nuestra quimérica realidad.






Miguel Angel Hernández Cortes
Prof. María del Carmen Cárdenas López
Grupo: EM-11.









A la vida, que todos los díasnos brinda la oportunidad de echar a perder las cosas, pero también nos da la oportunidad de reivindicarnos.





Índice


Pagina.
Presentación. 3.
Mexican love.6.
Crisis. 8.
La crisis. 11.
A mis cuarenta y diez. 13.
Crisis existencial 15.Erika 17.
Crisis 19.
Crisis (Joaquín sabina) 21.
Andrea 24.
Janeth25.


Presentación.
Nadie que yo conozca es ajeno a el termino crisis, y es que la palabra crisis, en el plano existencial del ser humano, es la confirmación de que algo en nuestras vidas no marcha como debería de ser o que bien, algo debería de cambiar en nosotros. La crisis, puede ser el punto derompimiento, que nos permita desarrollar todos los sueños que hemos visto truncados en alguna fase de nuestras vidas — quien no ha oído en algún lugar la anécdota de él cuarentón que dejo su trabajo de burócrata para dedicarse a lo que siempre ha querido hacer, o de la señora divorciada que se ligo al amigo de su hijo y que afirma que con el se siente como de veinte y se viste y comporta como de quince,muchos a esta etapa la llaman crisis de la mediana edad. Crisis desde mi punto de vista se ha convertido en algo parecido a la palabra “CHALE” cuyo significado nadie conoce a ciencia cierta pues por cualquier cosa decimos chale —si estamos enojados decimos chale, si no entendemos algo decimos chale; de esta manera usamos la palabra crisis, pues como en el primer ejemplo le decimos crisis a estaetapa madurativa del animal humano en el que según nuestros prejuicios perdemos juventud y por lo tanto nos acercamos mas al panteón, también la llámanos crisis a esos momentos en los que la economía se ve limitada y duramente atacada por aquel animal carroñero llamado deuda, que se encarga de tirar por los suelos todas nuestras expectativas de pasar la quincena sin necesidad de retrasarle la tandaa la vecina.
Me encanta el tono disque enérgico y enojado de los periodistas y de los finísimos intelectuales de izquierda (aunque sean más mochos y cuadrados que don Francis Franco, mi villano favorito) que adornan nuestra pantalla chica, en el que cada dos por tres minutos nos andan diciendo que la gente ya no cree en la polaca, o que los políticos no pueden caer más bajo que aquelpresi-chente que era víctima de violencia domestica por parte de su señora y ex vocera denominándole a esta pantomima crisis institucional en la que la gente igual que siempre dejo de creer en las patrañas de los que pretenden dirigir los rumbos de este cabaret al que llamamos país.
Por eso y porque puedo los invito a leer esta antología variopinta en la que podrá encontrar sobras encogidas y seleptas...