Antropolog A Y Derechos Humanos

Antropología y Derechos Humanos: alteridad y ética en el movimiento de los Derechos universales
La construcción del Derecho frente a la diversidad de las comunidades morales
En 2002 se realiza una reunión con 41 mujeres indígenas en Brasil. Fernanda Kaigang, abogada indígena, inquirió durante el encuentro sobre la posibilidad de considerar la costumbre tradicional de un pueblo originario comoequivalente a la ley, con capacidad para substituirlo dentro de la comunidad.
El Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes advierte que los “derechos propios” no pueden ser contradictorios con los derechos definidos por el sistema jurídico nacional ni con los derechos humanos internacionalmente reconocidos. Y al aplicarse sanciones penales previstas por lalegislación general, deberá tenerse en cuenta las características económicas, sociales y culturales de los pueblos originarios. Por lo que insiste en una negociación cuando leyes modernas y en especial los Derechos Humanos instituyen el carácter intolerable de determinadas costumbres. Por lo que, en respuesta a la preocupación de la abogada Kaingang, el Convenio no percibe como equivalentes lasnormas de los pueblos originarios y las leyes en el ámbito estatal o supra-estatal.
La autora, Rita Laura Segato, sostiene que el Derecho moderno se encuentra, además, en tensión con algunas costumbres del propio Occidente en plena modernidad. Por ejemplo, cuando un código civil suprime la “patria potestad” exclusiva del padre, y muy especialmente cuando incorpora y constitucionaliza los convenioscontra todas las formas de discriminación de género y racial, coloca órganos coercitivos al servicio de la erradicación del racismo y sanciona leyes que garantizan acciones afirmativas para beneficiar a las mujeres, a las personas negras o, inclusive, a los portadores de deficiencias físicas.
También en ese encuentro se preguntó sobre la relación entre la costumbre y la cultura. Lo cierto, para laautora, es que la cultura es constituida por costumbres. Entonces, al formular las reivindicaciones de género, se debía pensar y sugerir maneras de modificar las costumbres que las perjudicaban evitando que estas modificaciones alcanzasen a la cultura como un todo. Había que implementar estrategias de transformación de algunas costumbres preservando el contexto de continuidad cultural.

Elrelativismo de las culturas y el universalismo de los Derechos Humanos: estrategias para la resolución de este dilema
Es muy difícil desde una mirada antropológica convivir con el proyecto universal (o universalizante) de los Derechos Humanos.
La antropología, a lo largo del siglo XX, ha intentado trabajar la conciencia de la humanidad para percibir y aceptar la variedad de las perspectivas culturales ydel os conceptos de bien. La tarea de la antropología ha sido dislocada en un momento en que las culturas consideradas más distantes desde la perspectiva occidental tienen que dialogar y negociar sus derechos en los foros establecidos por sus respectivos estados nacionales.
La autora presenta tres propuestas de conciliación entre el principio relativista y el universalista.
1. Presentada por elantropólogo Richard Wilson en los años 90. Wilson ve a los derechos humanos como un recurso disponible. Son la primera ideología universal del mundo. Es imposible vivir actualmente en cualquier lugar sin tener encuentros regulares con agentes o instituciones del estado-nación, como sucedía en los días dorados del funcionalismo antropológico y del relativismo cultural hasta mediados del siglo XX. Elantropólogo debe, entonces, estudiar la interconexión y la interacción de los procesos legales que operan a diferentes niveles.
Por ejemplo, los indios U´wa de Colombia, articularon los principios de su cosmología tradicional y el idioma de los Derechos Humanos para garantizar el control de los recursos naturales localizados en su territorio (el petróleo). La particularidad de la cultura y el...