ANUNCIO
Sto. Tomas e Aquino, De potentia, III, a. IX , ad 12, 12, 15; De creaturis sipiritualibus, ad 13.
“Algo que no tiene conciencia autoconsciente – se dice- nopuede darse cuenta de que ha eliminado su devenir, y por esto tampoco puede sufrir si es eliminado: para sufrir por ello se requería que ese algo conceptualizara el valor, confrontándose con lano-vida. Pero esta capacidad de reflexionar sobre si, de confrontarse con la antítesis, de posición dialéctica del valor de la vida mediante la negación del valor de su opuesto, no pueden tenerla ni elembrión ni el feto; el primero no tienen conciencia, el segundo tiene conciencia pero no autoconciencia.”
Sgreccia Elio, Manual de Bioética, Editorial Diana, México, 1996, pag 355.
H. T Engelhardt, elcual, al no evidenciar en el embrión y en el feto esas características esenciales –según él – propias de la persona, es decir, la autoconciencia, la racionalidad y el sentido moral, sostiene que:“no todos los seres humanos son personas. Los fetos, los infantiles, los retrasados mentales graves y los que están en coma irreversible constituyen ejemplos de no-personas humanas. Tales entidades sonmiembros de la especie humana. No tiene estatuto, en sí y por si, en la comunidad moral. No son participantes primarios en la empresa moral. Solo las personas humanas tienen...
Regístrate para leer el documento completo.