Apostasía En España

APOSTASÍA

La apostasía se considera la negación, renuncia o abjuración de la fe en una religión, pudiendo ampliarse la definición a la salida o abandono irregular de una orden religiosa o instituto.
El tratamiento que ha recibido la apostasía por parte del Derecho ha variado a lo largo de los años; pasando de una gran rigidez inicial, llegando incluso a la pena de muerte, hastallegar a la defensa de la apostasía como un derecho en nuestros días.

Estudiando la evolución de la penalización de la apostasía desde el progreso de los reinos cristianos en la Reconquista podemos ver con claridad como fue variando de intensidad en función de los recursos y convicciones de cada época.
En los primeros momentos de la Reconquista hubo un alto grado de tolerancia con aquellos queprofesaban otra religión, entre otros motivos porque, pese a la victoria militar alcanzada, era inviable imponer los ritos cristianos entre una población que llevaba siglos practicando su propia religión. Aunque esta situación se mantuvo cierto tiempo pronto comenzó a surgir la idea de que el rey era un enviado de Dios con la obligación de defender a la Iglesia católica, apostólica y romana. Alconsiderarse al rey el defensor de la Iglesia y unir de esta manera los conceptos de Iglesia y Estado, una conversión a otra religión, como el judaísmo o el islam, se consideraba una traición al monarca y al propio estado y fueron perseguidas y castigadas duramente.
El castigo inicial por la apostasía o el abandono de la Iglesia era la quema en hoguera, de esta manera cualquier persona quedejase la fe cristiana para convertirse a la religión judaica o musulmana sufriría esta muerte y la confiscación de todos sus bienes. Esta misma pena se imponía a todo judío que tratase de catequizar a un cristiano con el objetivo de cambiarle de religión.

Con la aparición de la Partidas cambió ligeramente el trato que recibía la apostasía. El nuevo castigo para aquellos apóstatas que se hubiesenconvertido al judaísmo era, en palabras de la época “algo peor que la propia muerte”, consistía en una muerte civil en la que se condenaba a la infamia de por vida; esto incluía la imposibilidad de ocupar ningún puesto de trabajo, la incapacitación para establecer un testamento o ser nombrado heredero en uno y la anulación inmediata de todas las compras y ventas que se realicen. Junto al cambioque sufrió la pena también apareció un cambio e la interpretación, algo más laxa ahora, del delito de apostasía. A partir de este momento se consideraría apóstata a todo cristiano que se hubiese hecho judío o musulmán, incluso aunque hubiese mostrado su arrepentimiento y hubiese vuelto al cristianismo, ya que se dudaba de las verdaderas motivaciones de los que regresaban al cristianismo y seconsideraba que habían escarnecido a las leyes. Esta nueva situación que habían de soportar los apóstatas era la muerte civil que contemplaba le ley castellana.
Este mismo texto recogía una pena distinta para el cristiano que recurriese a la apostasía para convertirse a la religión musulmana, en este caso se contemplaba la pena de muerte y la pérdida de todos sus bienes en favor de sus hijos, de notener hijos en favor de sus parientes cercanos y de carecer también de estos en favor del rey. La entrega de los bienes a los hijos se cumplía en muy raras ocasiones, pues aunque este delito estaba penalizado con esa sanción también era considerado un caso grave de herejía y en este supuesto los bienes iban a parar al fisco; por lo que en la práctica los bienes nunca llegaban a los hijos o a losparientes cercanos.
Se podía acusar de apostasía a una persona ya fallecida, teniendo un plazo de cinco años desde su muerte para hacerlo. Esta acción estaba recogida en la Partidas como “acusar a su fama”, como es evidente la única pena recogida era la confiscación de los bienes, pues cualquier otro tipo de castigo carecería de la menor efectividad en vista de las circunstancias.

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