ARDILLAS DE TARABAY

 ARDILLAS DE TARABAY

En un pequeño bosque que circunda la Escuela de Educación Inicial del pueblito de Zorca, Municipio Independencia del Estado Táchira, habitan entre otras especies de animales,una pequeña manada de ardillas, algunas tres o cuatro a lo sumo; pero el caso es que en varias ocasiones mis parientes y yo nos deteníamos a observar el curioso comportamiento de estos animalitos queal vernos con nuestras mascotas: “La Niña” y “Chispita”, dos perritas mestizas que a partir de cierto día, una de las ardillitas bajaba de los arboles a provocarlas y comenzaban una interminablepersecución a lo largo de la cerca del preescolar; la ardillita del lado de adentro y las perritas del otro lado con la lengua afuera de tanto correr y ladrar mientras nosotras como buenas espectadorasdisfrutábamos del hecho, hasta que finalmente la ardilla subía a un árbol y soltaba algo al suelo. Allí terminaba el espectáculo para nosotras quienes siempre quedábamos con la intriga por saber si elhecho se trataba de una discordia o simplemente de un juego entre los animales.
Poco tiempo bastó para saber lo que pasaba; sucede que la ardillita tenía sus crías en una horqueta de aquel árbol y aldetectarnos junto con nuestras mascotas, emprendía toda la treta de la provocación a las perritas para desviar su atención y la nuestra sobre la presencia de sus crías, lo supimos al poco tiempo quepudimos ver a las nuevas ardillitas saltando de rama en rama, mientras la madre de las ardillas y nuestras mascotas cada tarde juegan por entre los árboles sin hacerse daño.
Olvidaba decir; queaquello que la ardilla dejaba caer desde un comienzo del árbol no era otra cosa que alimentos que hoy comparte con nuestras mascotas como tres buenas amigas sin diferenciar su especie… y colorín colora‘o, el cuento no ha terminado, porque hemos aprendido la lección de que a pesar de ser muy animales, los animales llegan a tolerarse y a convivir en paz aun siendo muy diferentes.
Autores:
Miguel y...