Argumentos Módulo 3 Rieb
Hasta el momento colocamos a la formación dentro de un contexto histórico y social definido por las políticas del momento, desde la currícula hasta el enfoque empírico y tradicional que se gesta al interior de la institución y que es la escuela, con el docente y la relación tan estrecha que ambosguardan en la cotidianeidad con el alumno y su situación fuera del aula, reduciendo a esta formación a un “deber ser”, pensada en la lógica del porvenir, en modelos institucionales y personales, instrumentales, pragmáticos, de utilidad y eficiencia, en fin una formación que choca con la idea de formación, que como ya hemos mencionado anteriormente es la objetiva con la que no se ve. “La formaciónintelectual es la resistencia crítica al hombre cibernántropo (el hombre centra su vida en el avance informático y la tecnología de las comunicaciones), unidimensional, alienado, reducido, fragmentado y uniforme. La formación intelectual podrá estar marginada o silenciada pero nunca sepultada” (Carrizales Retamoza Cesar, 1988, p. 4).
En todo ese remolino medioambiental que reduce al alumno, loaísla, lo ignora, lo determina al fracaso o al éxito, le crea un papel en la sociedad, lo inserta a un rol productivo, a un factor de consumo cada vez más globalizado, más caótico, como diría Carrizales más uniforme, queda entonces un recoveco que pretende ser olvidado en la formación del alumno, “lo intelectual”, que llega a ser una actitud filosófica, para quién desarrolla esa habilidad, para quienreflexiona lo ya dado, lo ya impuesto, la experiencia del sentido común tan arraigado en lo social y en lo escolar, sobre todo por que la primera considera como una totalidad a la segunda, en términos del eficientismo productivo, es decir en lo que produce, alumnos útiles y eficientes que puedan enfrentar en términos de su educación básica una posibilidad mínima de desarrollo para la vida, en elcampo laboral o acceder a otros niveles educacionales para ver completa su educación y vislumbrar el ascenso a otro nivel social.
La actitud filosófica debe ser una habilidad, un saber hacer, un saber crítico, un hábito social que determine lo escolar y viceversa, que sea útil a las disciplinas que convergen en la educación, debe ser un acto de experiencia pedagógica, por que debemos recordarque la pedagogía vive en todos los discursos que la educación le ofrece, el proceso intelectual debe ser una interrogante permanente en la formación del sujeto. “La razón crítica no se limita a campos cerrados, como hacen por ejemplo, la razón científica y la razón tecnológica; el crítico, por tanto poseerá formación amplia y quedará abierto a todo discurso...la razón crítica debe pararse donde lavoluntad guiada por la prudencia, le dicte. El ejercicio crítico llevado hasta el final no acaba jamás” (Fullat Octavi, 1984, p. 119). Cabe aclarar que la razón en concepto de la disciplina filosófica, es indagar acerca del ser y a su reconocimiento, “la razón es una capacidad de conocer” (Ibidem, p. 19).
El trabajo intelectual en este instrumentalismo cotidiano y legitimado a través delpensamiento científico, cada vez es más excluido y se manifiesta su ausencia; cuando se pone de manifiesto cuando no se sabe, no se piensa y sobre todo no se hace, ausencias que se reflejan en la explicación de fenómenos naturales y sociales, de la cual persiste una práctica en formarnos más en contenidos y estructuras, en la razón institucional, en el deber ser, en la repetición de contenidos, que enun trabajo intelectual que conllevara la reflexión crítica, a la autorreflexión que haga de nuestro pensamiento objeto de indagación, ya sea como un hábito o como una estrategia para la reflexión permanente y autónoma. “La actitud característica del intelectual es la libre discusión crítica en busca del sentido de todo cuanto le rodea: el símbolo de la vida intelectual es, por lo tanto, la...
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