aristoteles

ARISTÓTELES
ETICA NICOMAQUEA
Libro I
I
El arte y la investigación científica, lo mismo que toda acción y elección parecen tener un bien, por ello se define con toda pluralidad el bien los que dijeron ver aquello a que todas las cosas aspiran. Siendo como son en gran número las acciones y las artes y ciencias, muchos serán de consiguiente los fines. Así, el fin de la medicina es la salud; elde la construcción naval, el navío; el de la estrategia, la victoria, y el de la ciencia económica la riqueza.
II
Es verdad también que no siempre elegimos una cosa en vista de otra. El bien con respecto a nuestra vida es cosa de gran momento y teniéndolo presente, como los arqueros al blanco aceptemos mejor donde conviene. Y así es, hemos de intentar comprender en general cual pueda ser laciencia teórica o práctica de que depende. Las cosas que hacemos tienen un fin por lo que debemos intentar determinar bien y a cuál de las ciencias o facultades pertenece. Vemos, además, que las facultades más estimadas le están subordinadas, como la estrategia, la economía, la retórica.
La política tiene como deber instruir al hombre hacia el bien puesto que prescribe que lo que se debe hacer y asu vez evitar.
Procurar el bien de una persona es algo deseable, pero es más hermoso y divino conseguirlo para un pueblo y para ciudades, lo que quiere decir que es lo primordial quizá para los servidores públicos pues están al mando de esta responsabilidad para lograr un bien común.
III
Las cosas nobles y justas que son objeto de la política presentan tantas diferencias y desviaciones, queparecen existir sólo por convención y no por naturaleza.
Como dice Aristóteles “Tan absurdo seria aceptar que un matemático empleara la persuasión como exigir de un retórico demostraciones”, lo que quiere decir que no puedes exigir cosas que simplemente no tienen un sentido de ser y respetando la identidad y competencias de una persona.
Por otra parte, cada uno juzga bien aquello que conoce, yde estas cosas es un buen juez; pues, en cada materia, juzga bien el instruido en ella, y de una manera absoluta, el instruido en todo, lo que quiere decir que para poder juzgar con sabiduría es importante conocer la materia en toda su extensión.
No basta el conocimiento para actuar correctamente: es necesaria la firmeza de carácter, lo que quiere decir que el conocimiento no es objeto del actuarcorrectamente, es necesaria una firmeza o disciplina.
IV
Aristóteles nos dice que todos tenemos concepciones diferentes de la felicidad pues unos creen que es alguna de las cosas tangibles y manifiestas como el placer, o la riqueza, o los honores; otros, otra cosa; muchas veces, incluso, una misma persona opina cosas distintas: si está enferma, piensa que la felicidad es la salud; si es pobre,la riqueza; los que tienen conciencia de su ignorancia admiran a los que dicen algo grande y que está por encima de ellos.
No hay duda de que se ha de empezar por las cosas más fáciles de conocer; pero éstas lo son en dos sentidos: unas, para nosotros; las otras, en absoluto.
Para ser capaz de ser un competente discípulo de las cosas buenas y justas y, en suma, de la política, es menester quehaya sido bien conducido por sus costumbres, lo que quiere decir que quien hace las cosas por el buen camino es porque desde casa ha aprendido las buenas costumbres.
El mejor de todos los hombres es el que por sí mismo [comprende todas las cosas], es bueno, asimismo, el que hace caso al que bien le aconsejar; pero el que ni comprende por sí mismo ni lo que escucha a otro retiene en su mente, éste,en cambio, es un hombre inútil.
V
Aristóteles habla de que el vulgo y los más groseros los identifican a la felicidad con el placer, y, por eso, aman la vida voluptuosa. Los principales modos de vida son, en efecto, tres: la que acabamos de decir, la política, y, en tercer lugar, la contemplativa.
Los mejor dotados y los activos creen que el bien son los honores, pues tal es ordinariamente el...