Armand mattelart

ARMAND MATTELART 
INTRODUCCIÓN
    Armand Mattelart llega a Latinoamérica en un momento de cambios sociales que exigía otra visión de la dinámica de la realidad, otra perspectiva de los acontecimientos que se iban gestando. Encargado inicialmente  de confrontar desde la óptica espiritual católica (estando al servicio del Vaticano en políticas de población es enviado a la Universidad Católicade Chile en 1962) los modelos estratégicos  de planificación familiar que estaban implementando las fundaciones Ford y Rockefeller en el contexto de la Alianza para el progreso que propugnaban la limitación en el número de nacimientos para “mejorar la calidad de vida de todos los habitantes del continente”. Eso hace gestar en él la necesidad de adentrarse en la investigación de las estrategias deComunicación aplicadas al combate ideológico, político y social con el deseo de poder crear alternativas ideológicas y políticas al comunismo ateo como al imperialismo protestante norteamericano. Finalmente a partir de ahí se encarga de la investigación sobre la Comunicación, insentivado inicialmente por los mecanismos de persuación de las mencionadas fundaciones y luego analizando los medios dederecha de Chile.
    La reflexión de Armand Mattelart para entender los proceso de cultura y de comunicación en Latinoamérica fue muy significante y oportuno. Apoyado en una metodolgía marxista de interpretación de los fenómenos sociales, originó una nueva escuela de pensamiento crítico en la región que se convirtió en un eje epistemológico fundamental para analizar la comunicación latinoamericanadurante varios años.
     De esa manera nacieron en Latinoamérica y sus escuelas de Comunicación un nuevo muro de conceptos –sobre todo críticos- que dejaron a las reinantes corrientes de pensamientos estructuralistas y funcionalistas de entonces, en un lugar menos monopolizante y talvez hasta menos destacado.
ANÁLISIS DE LA OBRA “PARA LEER AL PATO DONALD”
     A principio de los años 70`s latransición hacia el socialismo  en Chile, tuvo como respuesta el drástico bloqueo “invisible” de los Estados Unidos. Dicho bloqueo se extendió a todos los ambitos de la vida económica del país, salvo dos excepciones muy remarcables: los recursos técnicos y militares destinados a la fuerzas armadas y, lo más llamativo del caso, las revistas, comics, seriales televisivos, etc.
   Si bien respectoal envío de recursos técnicos y militares, la voluntad de controlar a la población en las vísperas de golpe de Estado resultaría evidente, el hecho de que mantener el abastecimiento de productos culturales dejaba al descubrierto, de forma especialmente significativa, la consideración de los mismos como otro tipo de macanismos de control social. Las palabras  del propio General Pinochet loilustrarían con precisión: no se trataba solo de controlar a la población, sino también de “conquistar las mentes”.
   Observadores del conflicto desde su epicentro, Armand Mattelart y Ariel Dorfman decidieron analizar uno solo entre los múltiples y variados caballos de Troya culturales regalados por los EEUU en medio de aquel embargo invisible. Se trata del ícono  cultural aparentemente más inofensivo entérminos ideológicos: un simpático personaje de la compañía Disney, que respondía al nombre de Pato Donald.
  
El libro trata sobre los mecanismos constructivos de modelos de pensamiento en el imaginativo infantil, que alcanzó un extraordinario éxito. Es un ensayo o un “Manual de descolonización”, tal como lo describen  sus autores, que analizan desde el punto de vista marxista la literatura demasas, concretamente las historietas publicads por Walt Disney para el mercado latinoamericano.
   El libro muestra de qué manera las historietas del Pato Donald inducen en los niños una clara ideología de clase dominante en la que se enseña que no se puede luchar contra el orden establecido. En las aventuras protagonizadas por el Tio Rico, Donald y sus sobrinitos, todo intercambio humano...