Armas para inmortalizar
Al llegar cada visitante a la exposición, Juan Alexis acude presuroso a la cita y explica pacientemente la temática de la obra que seencuentra actualmente en el lobby del edificio de la Alcaldía de Medellín. Al relatar el proceso de concepción de las piezas y el objetivo que éstas cumplen, este joven de 22 años recuerda cómo en añosatrás empuñaba una ‘lata’ para intimidar o atacar a sus vecinos, aunque asegura orgulloso que esta vida quedó en el pasado luego de que decidió abandonar la delincuencia y dedicarse a estudiar ytrabajar.
Y es que cerca de 30 mil navajas, puñales y cuchillos que fueron entregadas por integrantes de los grupos delincuenciales o decomisadas a éstos, fueron convertidas en esculturas humanas por elartista antioqueño Leobardo Pérez Jiménez, quien a través de figuras de cuerpos humanos quiso rendirle un homenaje a la vida y a la reconciliación que promueve actualmente la Policía Comunitaria delValle de Aburrá.
“Es increíble ver cómo las armas con las que antes hicimos tanto daño y por las que se derramó tanta sangres, ahora se convirtieron en una obra de arte para la vida. Realmente estaobra es hermosa”, asegura el joven, quien actualmente está vinculado como promotor de convivencia de la Policía Nacional.
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La obra “Armas para inmortalizar” está compuesta por 35 piezas, lascuales representan el cuerpo humano como símbolo de vida.
Foto: Pablo Pasos |
Iniciativa de vida
Y es que a diferencia de las esculturas realizadas con armas de fuego, donde éstas son fundidaspara obtener el material a trabajar, esta obra titulada ‘Armas para inmortalizar’ fue realizada de manera minuciosa, pues las latas fueron unidas una a una, dando forma a niños, hombres y mujeres...
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