arquitectura

Al pricipio Dios creó el cielo y la tierra. La Tierra era algo informe y vacío, las tinieblas
cubrían el abismo, y el soplo de Dios se cernía sobre las aguas.

Entonces Dios dijo: “Que exista la luz”. Y la luz existió. Dios vió que la luz era
buena, y separó la luz de las tinieblas; y llamó Día a la luz y Noche a las tinieblas. Así hubo
una tarde y una mañana: este fué el primer día.Génesis 1.1

1 - Luz/sombra

Necesitamos descubrir la luz, dejar que bañe y penetre las formas para descubrir entonces la arquitectura. Teñirla de suspenso o concentrarla, focalizarla y desvanecerla para poder establecer sensaciones en
el teatro de las formas. En la descripción que nos presenta la Biblia, Dios no sólo se preocupa del la existencia
de la luz como tal: reconoce también lapresencia de su antagónico, la sombra y establece el equilibrio necesario entre ambos. Nosotros sabemos inconscientemente que la luz ha de existir para poder obrar con las
formas pero en nuestra búsqueda las luces y las sombras son parte de nuestra paleta de materiales y no una
simple existencia necesaria para “notar” las superficies. Trabajamos con la luz y con las sombras en forma
simultánea ysiempre moviéndonos en el equilibrio de existencia que establecen: cada vez que se materializa
una luz, se materializa una sombra que es única para esa luz. Cualquier cambio que se disponga en la fuente o
en el tipo de luz será transferido a la sombra. Pongamos como ejemplo primitivo las fases lunares, la disposición de iluminación y sombra del sol sobre la luna y cómo percibimos esa transformacióndesde la Tierra. El
ejemplo nos deposita inmediatamente en el papel preponderante que juega el observador en la escena de las
luces y las sombras: ¿es la misma luz y son las mismas sobras las que observamos desde distintos puntos
del espacio?. Ejemplifiquemos tratando de tomar una fotografía sin sombras, con el sol justo por detrás nuestro y la misma de modo que el sol se ubique en formalateral, de modo que la primera carezca de sombras
pero tenga superficies muy iluminadas y la segunda encuentre un equilibrio entre intensidades y oscuridad.



Fig. 1 - La luz que recibe la Luna en la imagen sobre la izquierda proviene directamente por detrás nuestro por lo cual no
podemos percibir ninguna rugosidad sobre su superficie. En la segunda imagen, las sombras sobre el limbo ( franjade transición
entre luz y sombra ) que en este caso provienen de la luz del Sol que llega en forma lateral, muestran la verdadera textura de su
superficie.


La luz, como las sombras, modelan el espacio de la forma arquitectónica tanto como los materiales que intervienen. El ejercicio que presentamos intenta acercar este concepto a través de una
investigación que establece en cada grupo detrabajo un material y condiciones de luz distintas
para lograr una muestra lo suficientemente amplia en el repertorio luz-forma-sombra-observador.

2 - Materialidad

La luz no debería ser un simple hecho confirmado por la existencia de una ventana o la simple disposicón de un edificio a la luz del día: la luz debería ser el resultado de una búsqueda en comunión con la
necesidad espacialespecífica, con los materiales, con las formas, con las necesidades energéticas, etc. La
luz se transforma en un material más que tiene la propiedad de ser dinámico: se transforma a lo largo del
día y la noche siendo natural y puede variar sus propiedades siendo artificial cambiando la percepción que
tenemos del espacio. No es el mismo espacio el que observamos de día y de noche, aún dándonos laluz
artificial la posibilidad de que así sea. La luz se nutre o desvanece en los paramentos, en las formas sobre
las que se refleja multiplicándose cuanto más pulido y claro sea el material, desvaneciéndose sobre superficies más rugosas y oscuras. La luz interviene en la forma en que percibimos los colores pudiendo tomar la
coloración del paramento mismo o transformando la que emana del...