arte o morbo
El cine gore, nació de una mezcla entre el cine de terror y el cine de explotación, y se centra
básicamente en la violencia gráfica que mediante un exceso de efectos especiales intenta demostrar la
vulnerabilidad, fragilidad y debilidad del cuerpo humano y teatralizar su mutilación.Pero remontémonos, al inicio de todo, pues está claro que este género no surgió de la nada.
Los primeros atisbos de gore proviene de la Francia del siglo IX, concretamente del teatro Grand
Guignol* nacido en 1897 de la mano del dramaturgo Oscar Metenier. Sus polémicas
representaciones de torturas y violencia explícita escandalizaron y fascinaron a buena parte de la élite
parisina de finales de siglo. Pero esta no era la época
apropiada para este tipo de representaciones, por lo que no
tardaron en ser censuradas, hecho que en lugar de perjudicar
al teatro Grand Guignol, le proporcionó una especie de
estatus de culto entre los aficionados parisinos. Con la
entrada en la dirección de Max Maurey en 1989, este dio el
salto definitivo a las representaciones puramente de terror
desbancando definitivamente la temática nudista y sexual de
años anteriores. El resultado no pudo ser más exitoso; las
macabras representaciones de mutilaciones y asesinatos
atraían a los espectadores como abejas a la miel.
* Cartel del teatro GranGuignol
Pues bien, es obvio que el gore nació de este tipo de
representaciones teatrales, pero ¿Cómo surgió la idea? Pues bien, a mediados de los años 40 en los
EE.UU. las grandes compañías cinematográficas habían formado lo que se conoce como el Studio
System, con el que controlaban todos los aspectos relacionados con el cine. En 1949, la Corte
Suprema declaró que los estudios estaban realizando prácticas monopólicas con este sistema, y les
forzó a renunciar al control de los cines. De aquí en adelante se centraron en las grandes producciones,
abandonando así la producción de clase B, lo que facilitó el reconocimiento de la libertad de expresión
en dichas películas. Nace entonces el género gore de la mano de Herschell Gordon Lewis, con la
primera película conocida del género, "Blood Fest" 1963. Le siguieron entonces una serie de películas
de género de los que podríamos considerar una primera generación de directores gore (Andy Milligan,
Ted V. Mikels, Al Adamson, Ray Dennis Steckler). Esta primera generación, se basaba en el gore por
el gore, la sangre por la sangre, todo un despliegue de arte plástico y surrealista; eran películas de bajo
presupuesto con altas recaudaciones lo que resultaba bastante rentable pero como era de esperar la
gente quería más y esta primera generación empezó a decaer. Era la hora de renovar la clase gore.
Llegó entonces una nueva generación de directores que, sustituyendo el gore por el gore, querían utilizar
la sangre y el horror para transmitir una ideología o una crítica. La carnavalesca violencia sin sentido
sería sustituida por firmes cuestionamientos que encontraron en el lenguaje de la sangre el camino ideal
para escupir sus verdades al mundo de manera chocante. Es el caso de directores como (GeorgeAndrew Romero, Wes Craven, Tobe Hopper, Don Edmonds, T. F. Mous).
El primero George A. Romero, fue el encargado de popularizar este género con su película "La noche
de los muertos vivientes" y su secuela "El amanecer de los muertos" está considerada por el crítico
Roger Ebert como una de las mejores películas de terror jamás hechas y con mayor éxito. Según...
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