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Cualquier exposición sobre Juan Gris es un acontecimiento», afirma Juan Manuel Bonet, antiguo director del Reina Sofía y comisario de la muestra Juan Gris, hasta el 2 de julio en la galería Manuel Barbié (paseo de Gràcia, 66). La afirmación viene a cuento por el olvido que en España siempre se ha tenido hacia el considerado tercer hombre del cubismo –junto con Picasso y Braque–.
La primeramuestra en el país no se realizó hasta medio siglo después de su muerte, en la galería Theo de Madrid, en 1977. Y tuvieron que pasar ocho años más para que el Estado le homenajeara con una retrospectiva, en la Biblioteca Nacional.
Bonet no niega la culpa del franquismo en el hecho, pero recuerda que «la República tampoco hizo nada por difundir su obra». Pero de lo que nadie duda, ni dudaba, es de lacalidad de su arte. Así, para Salvador Dalí, Gris era el Juan de Herrera del cubismo y para Federico García Lorca fue «una de las voces más puras de las primeras vanguardias».
La muestra reúne 19 obras –óleos, dibujos y guaches– fechados entre 1909 y 1926, que presentan, sobre todo, bodegones, su tema más recurrente. Algunas piezas pertenecen al fondo de la galería y están a la venta, y otras sonde colecciones privadas. El conjunto abarca toda la vida artística del pintor, desde sus inicios naturalistas hasta el final, cuando recuperó su lado más simbolista, aunque nunca dejó el cubismo.
LA TRADICIÓN CLÁSICA / Gris (Madrid, 1887-Boulogne-sur-Seine, 1927) llegó a París en 1906, pero no pintó sus primeros cuadros hasta 1909, y de esa época es Nature morte, la acuarela que abre la muestra,un bodegón muy influenciado por Cézanne. Más cercano a los postulados cubistas es el estudio preparatorio Portrait de Legua (1910-1911). Y totalmente cubista es Compotier et verre (1916), la «obra cumbre de la muestra –apunta Bonet–. Es un Juan Gris canónico, purista, concentrado, analítico que sabe hacer obra moderna sin renunciar a la tradición de Zurbarán y de la pintura clásica española». Elrecorrido prosigue por la etapa en la que Gris abandonó los postulados más ortodoxos del cubismo. Y acaba con piezas posteriores a 1923 en las que, aunque se mantiene fiel al cubismo, hay un estilo más clásico y sereno.
Las influencias de Cézanne, Picasso y Braque hacen que en 1912 se incorpore al movimiento cubista. Ese mismo año entra en relación con el marchante Henry Kahnweiler, con quienfirma un contrato en exclusiva.
Su forma de entender la pintura se basaba en la prioridad de la idea frente a la imagen del objeto representado. Parte de lo universal para alcanzar lo singular, así la imagen acabará pareciéndose a la idea, que es la verdadera realidad. Cree que la pintura es algo más que la copia fiel de un objeto, es necesario construir o interpretar la realidad. Trabaja ladescomposición espacial, el collage y la técnica del papier collé (formas recortadas en papel y pegadas al lienzo).
Sus primeras obras son naturalezas muertas y algunos paisajes en los que destaca el aspecto constructivo y volumétrico de los objetos y de la composición. En su paleta predomina la monocromía de grises y ocres.
Naturaleza muerta con espejo (1910).
Introduce ciertos elementos cubistascomo la inversión de planos y los diferentes puntos de vista y aborda el problema de cómo la luz chocaba con los objetos.
En Casas en París (1911)
Gris pinta unos edificios intentando destacar su volumen, para ello, recurre a la segmentación de planos en las fachadas y tejados de las casas.
Naturaleza muerta: botellas y cuchillo (1912)
Es un bodegón típicamente cubista. Los objetosrepresentados, las botellas, el plato, el cuchillo y la superficie sobre la que se encuentran, están dispuestos vertical y horizontalmente con una ligera perspectiva tridimensional.
Reloj y botella de jerez o Composición con reloj (1912)
En esta obra Gris ha creado un entramado lineal que descompone los objetos y permite diferentes puntos de vista.
Violín y guitarra (1913)
En este bodegón se explora la...