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Barrió Chico, Infierno Grande
Srta. Rosa,
Le estoy escribiendo porque estoy hasta el gorro con mi chamaco, Juan. Las cosas han ido de mal en peor. Pues déjeme contarle de la tragedia que nosacaba de suceder. Ayer, después de tres semanas sin saber nada de Juan, entro a la casa como si nada había pasado. Me empezó a explicar pues en donde carajos se había metido en las últimas semanas. Meexplico que estaba buscando chamba en el norte, virgen santita que no fue algo más grave. Le dije que debería hablar con usted, a lo mejor usted le podía ayudar encontrar chamba en San Diego. Pero yasabe cómo es Juan, bien necio. La mujer de Juan y sus chamacos estaban tan emocionados. Juan le conto a su mujer que había encontrado chamba y que se van a mover al norte. Todo parecía como antes, lafamilia haciendo relajo y riéndose. El apá de mis hijos, Samuel, todavía no llegaba a casa. Pues estaba con sus compadres del barrio, en la cantina que está al lado del mercado. Sabía que mi Samuelestaba enfadado con Juan por haberse largado sin decir nada. Ya era casi la media noche cuando llego mi Samuel y estaba bien borracho.
Aquí es cuando las cosas se pusieron bien horribles. Juan y suapá empezaron alegar y gritar, luego los chamacos empezaron a chillar. Trate de apaciguar a Juan pero solo hizo que se enfureciera más. Samuel se empezó a poner violento, pues me espante y llame a lachota. Me arrepiento tanto de haber llamado a la chota. De repente oímos las patrullas llegando al barrio. Samuel y Juan salieron a la yarda, me quede en la casa con los chamacos y la mujer de Juan.Empecé a oír gritadero y a mi Samuel gritar un grosería a la policía. De repente trono dentro la casa el sonido de cuatro balazos. Corrí a la puerta, el policía chicano ese que le dicen el Chon tenía lapistola afuera y mi Samuel estaba tirado en la banqueta. Sentí mi mundo caer al suelo y no podía hablar con nadie, ni con el gringo ese que estaba con el Chon, ni con el jefe de policía. Esta...