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- Una historia de Don Bosco:

Dialogo entre Don Bosco y Don Caffaso.
Para representar mediante 4 personas:
Don Bosco (solo lectura)
Don Caffaso (solo lectura)
Don Bosco (escenas)
BartolomeoGarelli (escenas)


Don Bosco: Oiga, Don Caffaso… ¿cómo se encuentra? ¿Anda todo bien?

Don Caffaso: Bien, bien, joven Juan… Pero no podría decir lo mismo de ti ¿por qué te noto un poco triste?¿Acaso tienes problemas?

Don Bosco: ¿Problemas? No sé si llamarlo de esa forma… más bien, una pena, Don Caffaso.

Don Caffaso: ¿Cómo puede ser que un joven como tú tenga una pena a tan tempranaedad? Tienes juventud, vitalidad, objetivos, metas, Joven Juan… ¿cómo una pena puede romper todo eso?

Don Bosco: No lo sé… lo mismo me pregunto a veces. Usted lo sabe, Dios es mi guía, pero sucamino difícil. Cada vez que me levanto en las mañanas, le pido que oriente mi camino; mi porvenir. Sin embargo…

Don Caffaso: ¿Sin embargo? ¿qué sucede, joven Juan? ¿Por qué te quedas callado?

DonBosco: Son ellos, Don Caffaso, son los niños y jóvenes. Los miro, les sonrío, pero en sus ojos veo la soledad. Algunos viven en la calle, comen lo que cae de una mano. Otros roban para comer… muchosde ellos están presos: jóvenes con no más de 12 a 16 años que han caído en errores. Pero no puedo dejar de pensar que mientras yo estoy comiendo, cómodo en mi pieza, con ropa limpia y con metas yobjetivos, estos muchachos sufren de hambre, de soledad y abandono.

Don Caffaso: ¿Y por qué me cuentas todo esto, joven Juan?

Don Bosco: El otro día, caminando, me he topado con un muchacho. Notenía más de 16 años. Flaco, pálido y con los ojos apagados. Comotti lo golpeó con la escoba por no saber ayudar en la misa. Lo detuve, le dije que lo dejara en paz, y después conversé con él un rato.Le dije si alguna vez había oído la misa y lo invité quedarse. Al salir de la celebración, le pregunté su nombre. Bartolomé Garelli, dijo el muchacho. Venía de un pueblo llamado Asti. ¿Pero sabe,...