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Tercera revolución industrial
Martes, 18 de marzo de 2014 - Edición impresa En: Editoriales, Opinión
Internet y nuevas fuentes de energía
Jorge Antonio Lechuga Andrade (*)
Hace unos días tuvela oportunidad de leer el libro “La tercera revolución industrial”, del profesor Jeremy Rifkin, de la “Wharton School” de la Universidad de Pennsylvania, donde enfatiza sobre la transformación que seda en torno a la energía, la economía y el mundo. El pensamiento creativo del profesor Rifkin ha inspirado a políticos y ciudadanos a través de sus conceptos sobre el papel clave que las tecnologíasmodernas y las energías renovables pueden detonar en una transición hacia una economía de bajo carbono. Se relacionan las dos tecnologías distintivas del Siglo XXI: internet y las energías renovables.Recordemos que la primera revolución industrial fue un período histórico entre la segunda mitad del Siglo XVIII y principios del XIX, en la que la Gran Bretaña y luego Europa y Estados Unidos tuvieronel mayor conjunto de transformaciones socioeconómicas, tecnológicas y culturales de la historia de la humanidad. Esta revolución marcó un punto de inflexión en la época, modificando e influenciandotodos los aspectos de la vida cotidiana de alguna u otra manera; la producción agrícola y de la naciente industria se multiplicó, a la vez que disminuía el tiempo de producción. A partir de 1800 lariqueza y la renta per cápita se multiplicó como nunca, pues el PIB per cápita se mantuvo estancado durante siglos (Robert Lucas, premio Nobel de Economía 1995). En este período se inició una transiciónque acabó con una mano de obra basada en el trabajo manual y el uso de la tracción animal, siendo sustituidos por maquinaria industrial y el transporte de mercancías y pasajeros; la industria textil seinició en esta época, así como la extracción y utilización de carbón; construcciones para la comunicación, la introducción de la máquina de vapor de James Watt, así como el motor de combustión...