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5. La moral provisional. Tras haber encontrado la verdad indubitable del cogito, basamento de la Filosofía o Metafísica, Descartes plantea la posibilidad de aplicar la duda metódica al ámbito de la Moral, con el objetivo de hallar en la dimensión práctica de la razón humana: a) una verdad universal y necesaria, que fundamente a su vez el comportamiento ético, b) favorezca el domino de la razón yc) impida la tiranía de las pasiones. La Moral es el máximo grado de la sabiduría. Sin embargo y según admite el propio Descartes, como una ciencia de la moral presupone las otras ciencias, no se puede crear cuando se está trabajando en la elaboración rigurosa de las otras ciencias y al contrario que en la dimensión especulativa en donde sí era posible suspender el juicio para buscar losprincipios fundamentales y descubrir esa verdad evidente, la urgencia de la acción y las exigencias de la vida cotidiana impiden tal licencia; como afirmamos, la duda cartesiana es una duda teorética, luego no se circunscribe al terreno práctico o del actuar, porque en la vida no cabe vacilación. Por este motivo, Descartes decide proceder a configurar una moral provisional:

«Y, en fin, como paraempezar a reconstruir la casa en que se vive no basta haberla derribado y hacer acopio de materiales y arquitectos, o haberse ejercitado uno mismo en la arquitectura y haber trazado cuidadosamente el plano, sino que también hay que proveerse de alguna otra habitación en donde pasar cómodamente el tiempo que dura el trabajo, de igual modo, con el fin de no permanecer irresoluto en todas mis accionesmientras la razón me obligase a serlo en mis juicios, y no dejar de vivir desde luego lo más felizmente que pudiese, me formé una moral provisional que consistía solamente en tres o cuatro máximas que voy a exponer.»

La moral provisional cartesiana está fundamentada en el buen sentido y consiste en una serie de máximas, que sabemos probables pero que seguimos como si fueran indudables y verdaderas;en la tercera parte del Discurso del método, Descartes propone algunas normas sencillas que más tarde, a través de sus cartas y del Tratado de las pasiones, se han revelado como válidas y, desde su criterio, definitivas.

5.1. La primera regla. Para Descartes, la primera regla de la moral provisional:

«consistía […] en obedecer las leyes y costumbres de mi país, conservando constantementela religión en que Dios me ha concedido la gracia de que me instruyera desde niño, rigiéndome en las restantes cosas según las opiniones más moderadas y más apartadas de todo exceso, que fuesen comúnmente aceptadas en la práctica por las personas más sensatas con quienes tuviera que convivir. Porque habiendo comenzado ya a no contar para nada con las mías propias, puesto que pensaba someterlastodas a un nuevo examen, seguro estaba de no poder hacer cosa mejor que seguir las de los más sensatos. Y aun cuando entre los persas y los chinos hay quizá hombres tan sensatos como entre nosotros, parecíame que lo más útil era acomodarme a aquellos con quienes tenía que convivir.»

La primera norma prescribe a) observar la Religión y las costumbres del pueblo en el que se vive y b) adoptar unapostura moderada, ante la diversidad de opiniones. Por un lado, el mandato de obedecer las costumbres y las leyes, que insta a un claro conformismo social, es una necesidad práctica cuyo objetivo es garantizar la paz del orden social, condición fundamental para la búsqueda de la verdad; por otro lado, con el mandato de adoptar una actitud moderada, Descartes parece sugerir que en cuestiones decostumbres lo más razonable es evitar las posturas radicales y/o extremas y guiar nuestra conducta por la sensatez, como actitud intermedia entre la verdad y la falsedad. De otra forma, si en un plano teórico seguimos de forma absoluta una norma moral que sabemos que es buena, entonces estaremos actuando bien. Pero en un plano práctico, la cuestión es algo más compleja porque, si observamos con la...