Asla

EL RESPETO DE LA VIDA HUMANA NACIENTE Y LA DIGNIDAD DE LA PROCREACION.
Numerosos obispos, teólogos, entre otros, han interpelado la congregación para la doctrina de la Fe, la cuestión de si lastécnicas biomédicas que permiten intervenir en la fase inicial de la vida del y aun en el mismo proceso procreativo son conformes con los principios de la moral católica.
El Dios Creador, exige que elhombre tome conciencia de su inestimable valor y acoja responsablemente el don de la Vida, y este principio debe ser colocado en el centro de la reflexión.
Dios ha creado al hombre a su imagen ysemejanza, confiándoles la tarea de ‘’dominar la Tierra’’. La investigación científica constituye una expresión significativa del señorío del hombre sobre la creación.
La ciencia y la técnica no puedenindicar por si solas el sentidos de la existencia y del progreso humano. Los criterios orientadores no se pueden tomar ni de la simple eficacia técnica, ni de la utilidad que pueden reportar a unos acostas de otros; a causa de su mismo significado intrínseco, la ciencia y la técnica exigen el respeto incondicionado de los criterios fundamentales de la moralidad: ‘’Deben estar al servicio de lapersona humana, de sus derechos inalienables y de su bien verdadero e integral. ‘’
La ley moral natural evidencia y prescribe las finalidades, los derechos y los deberes, fundamentados en la naturalezacorporal y espiritual del ser humano. Esta ley no puede entenderse como una normatividad simplemente biológica, si no que ha de ser concebida como el orden racional por que el hombre es llamado adirigir y regular su vida y sus actos y principalmente a usar y disponer de su propio cuerpo.
La biología y la medicina contribuyen con sus aplicaciones al bien integral de la vida humana, pero ningúnbiólogo o medico puede pretender decidir el origen y el destino de los hombres; esta norma se debe aplicar de manera particular a el ámbito de la sexualidad y la procreación.
El magisterio de la...