Atando cabos Carlos Isod Revista la Peste

SETIEMBRE DE 2006

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Atando cabos
Diagnóstico, cura, material
CARLOS ISOD*

“Ya se oyen palabras viejas.
- Pues aguzad las orejas.”
A. Machado1

l. Diagnóstico:
herramienta y resistencia.

S

abemos que el término diagnóstico deriva de diagnosis que significa ‘conocer a
través de’. Si bien una amplia gama de
actividades humanas –desde los antiguos
augures hasta los modernos economistas ypolitólogos– han utilizado y utilizan el diagnóstico, cada una de ellas acorde a sus fines,
a nosotros nos llega desde la medicina como
el arte de conocer la naturaleza de una enfermedad a través de sus signos y síntomas.
Como consecuencia de la clasificación diagnóstica es posible identificar una enfermedad o entidad nosográfica mediante una sucinta descripción o un rótulo que hace las
veces de tal,independientemente del caso
particular. Cae de suyo que el objetivo prioritario del diagnóstico es el de ahorrar tiempo al médico para encarar su acción terapéutica, en segundo lugar evitarle al paciente los
trastornos y peligros de un tratamiento inadecuado y, en tercer lugar, la nada despreciable ventaja de formar parte de un código
unificado que permite un rápido entendimiento acerca de la afeccióna tratar entre

quienes pudieran estar implicados en ello.
Cuando se consulta a un médico se espera
que éste haga su trabajo con la mayor economía posible de tiempo y recursos, y de la manera menos riesgosa y dolorosa posible.
Coincidiendo con la actuación médica, en
la práctica psicoanalítica la posibilidad de establecer un primer diagnóstico tiene la indiscutible virtud de permitir evaluar sila persona que consulta sería o no permeable al
influjo del método terapéutico que practicamos y, más aún, estimar los riesgos que resultarían de la aplicación inconveniente del mismo. En ese punto se acaban las coincidencias.
El diagnóstico psicopatológico, fundamental
para la terapéutica psicofarmacológica y para otros métodos psicoterapéuticos basados
en la aplicación de estrategias, enpsicoanálisis es válido –en lo que a la práctica clínica se
refiere– sólo en términos muy amplios referentes a la aceptación, por parte del analista,
de un pedido de tratamiento. Más allá de ello
la virtud del diagnóstico puede pasar a ser
defecto, y la herramienta resistencia. Esto
siempre y cuando consideremos que el método psicoanalítico no admite otras estrategias
que las que establece el encuadre:abstinencia 2, atención flotante-asociación libre y frecuencia de sesiones, así como las intangibles
de mantener vivo el interés del paciente respecto de los hallazgos del análisis y la de

* tel (054) (011) 4778-1504 / e-mail carlosisod@uolsinectis.com.ar
1 “Proverbios y cantares”
2 El tema de la abstinencia ha ocupado un espacio creciente en nuestras reflexiones y teorizaciones. Más que
pensarlacomo regla –precepto, mandato, reglamento– prefiero pensarla como estrategia técnica que no
abarca solamente el espacio de la sesión sino la totalidad del vínculo paciente-analista. Entiendo que
pensar la abstinencia de esta manera, más pedestre, le quita un inconveniente matiz de orden religioso al
que lamentablemente somos propensos.

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CARLOS ISOD ATANDO CABOS. DIAGNÓSTICO, CURA,MATERIAL

el método
psicoanalítico no
admite otras
estrategias que las que
establece el encuadre:
abstinencia, atención
flotante-asociación
libre y frecuencia de
sesiones, así como las
intangibles de
mantener vivo el
interés del paciente
respecto de los
hallazgos del análisis
y la de respetar el
‘timing ’ que impone
la resistencia.

respetar el ‘timing’ que
impone la resistencia.

Un análisis tienecomienzo formal en un
acuerdo contractual. Esa
es, en cierta medida, una
visión de superficie, ya
que ningún proceso de
análisis se desencadena
si no se da la asombrosa
convergencia entre alguien que, padeciendo,
se interroga acerca del
sentido que tiene en su
vida eso que le pasa, y
un otro a quien le conmueve ese padecimiento
y está dispuesto a sumergirse en su misterio
buscándole un sentido.
El...