Ateismo En Jean Paul Sartre

Jean Paul Sartre fue un filósofo francés cuyo pensamiento seguía la corriente existencialista.
En la ontología de este pensador tiene una importancia decisiva la distinción entre ser en sí (lo que es) y el ser para sí (lo que está ahí), al hombre lo sitúa como distinguido radicalmente de todo ser en sí por medio de la conciencia del para sí, a través de la conciencia el hombre se auto descubrecomo el ser a través del cual la nada aparece en el mundo.
A partir de la idea de la nada, el hombre es proyecto y transformación; el hombre espera transformar el ser para sí en un ser en sí-para sí , sin embargo aún cuando el hombre intente lograr ese cometido con toda su aspiración, la conclusión de este intento será vano pues el resultado recae en el absurdo, el hombre anhela la plenitud deidentidad consigo mismo (que sería su transformación en un En sí para sí) pero realmente nunca llegará a ella pues el hombre nunca logrará la identidad consigo mismo y por eso la conciencia es pura negatividad y no puede ser plena, se traduce como un intento de ser Dios, un deseo imposible del hombre. El resultado de la imposible unidad del ser para sí y del ser en sí se refleja en la proyecciónfutura, es decir el hombre desea ser en sí, la libertad es reflejo de este deseo del hombre hacia el futuro, el hombre: “es una libertad que escoge, pero no escoge ser libre; esta condenado a la libertad”.
En su intento de autoconocimiento juega un papel muy importante la relación del hombre con los otros, dirá el filosofo francés que “yo tengo necesidad del otro para captar plenamente lasestructuras de mi ser”. En mi encuentro con el otro —expresado como ser para el otro—, el hombre, que es una libertad, se encuentra con otro hombre que es otra libertad; el otro y yo somos dos libertades que se enfrentan y dependen mutuamente, el otro es un límite de mi libertad que tengo que aceptar libremente.
Tomando como referencia la premisa anteriormente mencionada, Sartre considera lasrelaciones humanas concretas desde la perspectiva fundamental del conflicto pues como el hombre desea la libertad del otro en cuanto tal, para recuperar la libertad para mí entonces tengo que apoderarme de la libertad del otro. Así el amor es un intento de apoderarme da la subjetividad del otro, no es darse al otro, sino exigir que el otro se me entregue. Se hace del amor un juego, ahora todo quedareducido en cada uno al querer ser amado sin llegar efectivamente a la realidad del amor; en suma, mi amor al otro es en el fondo mero amor de mí mismo, y el amor del otro a mí es mero amor de sí mismo. El ser para el otro queda reducido al ser para sí mismo. El problema del ser para el otro queda indisoluble: cada uno permanece para sí mismo en una subjetividad total, no se puede explicar el sentido delas relaciones interpersonales.
Ahora es preciso describir el problema de la libertad desde la perspectiva de Jean Paul Sartre.
Ya se había mencionado que el hombre es libertad y por eso no es sino lo que él decide de sí mismo, el poder de autodecisión es lo que caracteriza la libertad por eso no puede sorprender la importancia que en la libertad sartriana corresponde a la responsabilidad.Para elegir una opción libremente el hombre debe tener el conocimiento del contenido y de los motivos que invitan a la opción por la libertad y sin ese conocimiento entonces se sujetaría todo a una opción por optar, una mera arbitrariedad y la libertad se degradaría en una forma del azar.
A partir de la concepción de la libertad humana como absoluta y absolutamente autónoma, Sartre concluye lainsociabilidad entre la existencia de Dios y la libertad del hombre pues “si Dios existe, el hombre no es libre; si el hombre es libre, Dios no existe”.
En su autobiografía Les mots cuenta el principio de su ateísmo: siendo niño hizo algo reprochable y sintió la mirada de Dios, aunque después se enfureció ante tal indiscreción y blasfemó; desde entonces “Dios no volvió a mirarlo nunca”.
Él supone...