Avaricia y necesidad

Pues sí, era el humo del cigarrillo que acompañada con su voz casi apagada dando a expresar a mi parecer el inicio del infierno, y más aun con su mano temblorosa desenvolviendo el papel como si fueraun regalo dado a un niño.

Es así que don Carlos termino de abrir el paquete, y con una voz alentadora dijo, ¡ooh ¡ qué hermoso cuadro! Y de inmediato me miro con ojos muy tristes y haciéndome lainterrogante ¿Por qué me traes esta maravilla?, a lo que yo respondí casi confuso y asustado, … es para poder alimentarnos esta semana con el dinero que usted pagara por el…, Confundido por mirespuesta don Carlos atino únicamente a decirme,… pagare lo justo por el, pero ahora te daré solo la mitad, y la diferencia te la daré otro día.

Corrí muy contento para darle el dinero obtenido a mi madre,pero ella muy preocupada me comento que era muy poco para tal cuadro, bueno, se me ocurrió algo en ese momento, Salí nuevamente a la casa de don Carlos y sin más demora recogiendo mi pelota hice elmayor de mis sacrificios, le di en venta mi pelota a don Carlos, la cual lógicamente, el muy gustoso acepto el trato y a mi parecer pago muy bien por ella, más de lo que alguien o usted imagino, puessi, no miento, me ofreció su casa, su auto y una bicicleta, al aceptar tal propuesta corrí nuevamente donde mi madre muy contento y saltando de felicidad y le conté la nueva noticia, ella, muysorprendida me reprime diciendo, ¡que! ¡estás loco!, ¿Cómo pudiste creer tal cosa?, claro, aunque en el fondo estaba muy contenta, ya que por fin se despidió de la odiosa pelota.

Durante mucho tiemposentí la curiosidad por saber del porque de tal oferta irresistible, ya que don Carlos cumplió su palabra entregándonos su casa, auto y bicicleta, la verdad fue algo muy inimaginable y difícil de creer,asi que fui a su nueva casa, claro, más lujosa y con muchos mas autos, cosa que me parecía muy extraño ya que el hombre no trabajaba, ni tampoco salía de su hogar, aunque tan solo para adquirir...