Ayer
La brisa helada congela mis dedos, evitando la circulación de mi sangre. Mi respiración esbrusca, mis pulmones se acortan lentamente, causando dolor.
Lejanamente mi vista se acorta y mira un punto fijo, oscuro y borroso, formando una silueta de gran tamaño. Se acercalentamente hacia mi, la silueta es más clara... pelaje oscuro, ojos amarillentos brillando intensamente. Corre más de prisa, veo colmillos afilados y largos, una columnaencorvada. Acelera más... cuatro patas, grandes con garras fuertes como si fuesen el mismo hielo consistente difícil de quebrar.
Mis pies no reaccionan, no se mueven. Quiero correr,escapar de allí cuanto antes.
Se abalanza sobre mí, un cuerpo pesado choca contra mi pecho impactando así mis músculos y frágiles huesos.
No puedo moverme, mi organismo no quiereresponder.
Siendo destrozada por aquellas garras filosas, rasguñan mi entidad. Siendo mordida por aquellos colmillos sangrientos de mi propio flujo. Me es imposible respiraren este aire tan frío y sólido.
Me despierto bruscamente, todo fue tan solo un mal sueño. Siento un pesar muy firme en mi pecho, descortésmente conservo la necesidad dedesplazarme de un lado de mi cama y, al leve rose, percibo un pelaje muy fino en donde experimento el profundo y agitado latido de Brandi, mi perro. Anhelando la caricia de su dueña.
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