Bababa

*“Si no sufre, ¿cómo vas a estar seguro de que obedece tu voluntad y no la suya propia? El poder radica en infligir dolor y humillación. El poder está en lafacultad de hacer pedazos los espíritus y volverlos a construir dándoles nuevas formas elegidas por ti.”
Las palabras de O’Brien son tan crudas como realmente ciertas.Winston ya ha sido encarcelado en el Ministerio del Amor y está recibiendo el tratamiento de su enfermedad, está aprendiendo a amar al Gran Hermano.
La torturafísica, pero sobretodo psicológica que le persigue día a día, va haciendo poco a poco su efecto aunque este no sea consciente; pues, realmente, no es consciente de nada.Finalmente este sucumbe y asimila el doblepensar, el pensar del Gran Hermano. El sistema puede con el individuo.
Habiendo desglosado y analizando el libro desde unpunto de vista existencial, es curioso ver como Orwells crea una sociedad que lleva al extremo la idea del control del pensamiento, a través de la represión. Como secita en el libro, es una sociedad que aprende de los errores de la Inquisición, de los Soviéticos y del Nazismo (entre otros) y forja su base en el doblepensar y delcontrol del cambio.
Podríamos preguntarnos cómo de lejos está la sociedad actual de esta sátira, cómo de lejos está el individuo de hallar su verdadera identidad ycómo llega a corromper el sistema al individuo.
¿Nos hemos sometido ya a un Gran Hermano? ¿Somos realmente lo que queremos ser?
Fríamente y frivolizando, actualmentetambién nos encontramos rodeados de telepantallas, recibimos información “inventada” y una constante represión no formal. “La esperanza está en los proles”.