Ballet

Ballet
Me llamo María José y tengo 19 años. Hace cinco años mis planes eran entrar a la compañía nacional y bailar ballet por el resto de mi vida, las cosas han cambiado desde entonces, pero me gustaría compartirles como un día cambió el rumbo de mi vida drásticamente.
Me desperté con el irritante sonido del despertador, abrí un ojo como si no quisiera despertarme por completo y lo volví acerrar intentando regresar a mi sueño en donde me aceptaban en la compañía, pero no logré que el sueño regresara.
Me di por vencida y me levante de mala gana de la cama, tomé mis mallas y leotardo y me metí al baño. Mientras el agua caía sobre mi espalda, cerré los ojos y pensé en lo que había ocupado mi mente desde hace casi un año pero que cada vez se acercaba más, la audición para la CompañíaNacional de Ballet que tendría lugar en tres días. Pero como de costumbre me inundó un sentimiento de profunda preocupación ante la posibilidad de que me rechazaran. Así que mejor dejé el tema a un lado y puse atención en lo que estaba haciendo.
Cuando estaba lista, mi mamá me llevo por la ruta de siempre hacia la academia, todavía sin que el sol saliera totalmente.
-¡Que te vaya bien! - gritó mimamá desde la ventanilla del coche mientras me bajaba. Regresé la mirada hacia el coche y le dedique una sonrisa distraída a ella y a mi hermana que me veía desde el interior del coche, lista para irse a la escuela.
En cuanto el coche aceleró, seguí mi camino hacia el interior de la academia. Me dirigí hacia los vestidores y me quité el abrigo y coloqué mis zapatillas.
Entré al salón aestirar, y hacer tiempo en lo que mi maestra llegaba. Como a los quince minutos entro por la puerta la señora, flacucha y aparentemente descuidada señora de 45 años que yo veía todos los días.
-¿Ya calentaste?- dijo con su extraño acento que a veces me cuesta descifrar.
-Si- dije con voz alegre.
- Muy bien, vamos a empezar entonces.- dijo ella mientras asentía con su largo cuello y el chongo perfectoque adornaba su cabeza.
(Al final de la clase)
-Terminamos- dijo la Señora Hathway, mientras caminaba hacia la salida del salón.
Colapse en el piso y tomé aire profunda y desesperadamente mientras otra gota de sudor se deslizaba por mi espalda, estaba exhausta. E quede en la misma posición por otros 10 minutos, finalmente decidí levantarme y arreglarme para esperar a que mi mamá viniera pormí.
Salí de la academia y me senté en la acera a esperar mientras comía una insípida barra de cereal. Ya era medio día y el sol pegaba en el lado derecho de mi cara, era agradable porque, a pesar del sol la temperatura era fría.
No tuve que esperar mucho para que mi mamá llegara en la familiar camioneta azul marino que veía todos los días. Ya era medio día así que mi mamá ya estaba arreglada ycon el cabello algo oscurecido por el agua del baño que había tomado.
-¡¿Cómo te fue?!- dijo ella con una voz entusiasta y una enorme sonrisa en la cara mientras me subía al asiento delantero.
Mi mamá siempre había apoyado mi carrera como bailarina y respetado las decisiones y sacrificios que he tenido que hacer para conseguirla, a diferencia de mi papá quien estaba en total desacuerdo con lossacrificios que había en mi vida a causa del ballet, él quería que yo estudiara una carrera como la de él y tuviera una vida normal, ese era exactamente el problema, yo no quería tener una vida normal. A pesar de eso, sinceramente no me afectaba mucho su opinión ya que aunque me criticaba ocasionalmente, me dejaba seguir el camino que yo quisiera.
-Muy bien, terminé de montar mi variación de laaudición, y la señorita Hathway me dejará presentar la variación del Cisne Negro para los puntos extra- le dije muy entusiasmada, sin importarme que ella no tuviera idea de lo que yo estaba hablando.
-Me alegro mucho por ti, estoy segura que te van a aceptar sin ningún problema- dijo con una voz muy suave y amable.
A pesar de que mi mamá no entendía muy bien la dinámica de las clases, ella me...