Barbarie de mariners en afganistán: historias de horror

Barbarie de mariners en Afganistán: historias de horror
En este artículo radica la importancia de atemperar las estrategias del estado, ante la barbarie de parte de los narcotraficantes; sinembargo, el imperio de la ley debe imponerse, cero tolerancia, las fuerza del estado solo deben proteger dos cosas: a los ciudadanos y su misma integridad. De acuerdo a la importancia de su función si loselementos del estado para proteger estos dos derechos deben decidir entre actuar y ser prudentes me inclino por la “acción” si de ella depende la integridad de mi familia, la mía, mis bienes y derechos.No obstante ¿Cuántos civiles han muerto a manos no sólo del narco sino del propio ejército y las corporaciones policiacas, o de responsabilidades directas del Estado como el caso de la guarderiaABC, o los que han muerto en feudos privados como los mineros de Pasta de Conchos? ¿Esas víctimas tienen que estar de acuerdo con las tácticas del General, del sector privado, del Estado y de la ley queno los protege? Ejemplo: el caso de los niños Almanza, de los estudiantes asesinados por el ejército en el Tecnológico de Monterrey presentados como criminales, de jóvenes muertos en Morelos a manosde la Marina y de las decenas de asesinatos ejecutados por cuerpos policiacos en Juárez a defensores de DDHH, incluso la muerte de jóvenes a manos de la patrulla fronteriza; todos ellos son síntoma dela misma idea que promueve el General y que curiosamente apoyan irreflexivamente muchas personas. Es una falsa salida creer que de un lado hay crimen y del otro justicia. La diferencia entre estos dosgrupos, el “crimen” y el Estado, es que uno está mejor organizado que el otro o el segundo está subordinado al primero, en realidad no hay una separación. La barbarie no puede acabar con la barbarie.Lo que declara el General está totalmente fuera de cualquier sistema de justicia y de humanidad.
En efecto, el Estado debe proteger a los ciudadanos, los delincuentes lo son. De hecho no son...