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Villa Nueva: 55 mil atrapados en la pobreza
Las áreas verdes de Villa Nueva han dado paso en menos de 6 años al asentamiento humano en condiciones de miseria más grande de Centroamérica.
Muchas de esas áreas que se considerarían parte del cinturón ecológico de la capital están ocupadas ahora por más de diez mil viviendas precarias, en el asentamiento El Zarzal, cuyos pobladores carecen deservicios básicos, como agua potable y drenajes.
El Zarzal, en la finca del mismo nombre, está integrado por el complejo de asentamientos Mario Alioto López Sánchez, Mártires del Pueblo, Colinas de Villa Nueva, 9 de Julio, Altos de Primavera, Las Victorias, La Paz y Valle de Nazareth, a 22 kilómetros de la capital.
Fenómeno sigue
Para William Mazariegos, del Frente de Pobladores de Guatemala,Frepogua, la inexistencia de una política de vivienda y la migración forzada de las áreas rurales, ante la falta de trabajo y opciones, provoca que hoy los cinturones de miseria se extiendan por todo el departamento de Guatemala y amenacen con invadir parte de la Costa Sur.
Por lo menos 55 mil personas viven hacinadas en El Zarzal, ocupado desde 1995, según un estudio efectuado por la trabajadorasocial Marta Yolanda Gómez Hernández, para Prosana/Care y la comuna de Villa Nueva.
Esto, sin tomar en cuenta otros 35 asentamientos menores que se encuentran aislados en el municipio, en especial alrededor de la Central de Mayoreo, El Mezquital y Ciudad Peronia, de acuerdo con otro informe del Centro de Estudios Urbanos, CEUR.
Miseria y abandono
La vida para los habitantes de El Zarzal, así comopara el resto de pobladores de asentamientos periféricos, no es fácil. Deben afrontar diariamente condiciones de vida desfavorables, con altos índices de insalubridad, como consecuencia de la miseria, abandono y hambre.
El documento de Prosana/Care revela que el salario promedio de los vecinos oscila entre Q800 y Q1,200, para el sostenimiento de una familia de más de siete miembros.
Mazariegosafirma que la falta de escolaridad de los trabajadores de los asentamientos los obliga a dar mano de obra no calificada que absorben industrias textiles y otras fábricas de la capital y ese municipio.
Sin agua
Ana María Hernández vive en el sector Mártires del Pueblo, tiene cinco hijos, y su esposo, un albañil desempleado, no puede comprar el tonel de agua que todos los días necesitan para susservicios mínimos.
Los vehículos cisternas que llevan el líquido lo venden a Q3 el tonel, lo cual suma más de Q90 mensuales.
“Ahora que vienen las lluvias, es peor, porque las calles se vuelven lodozas y los camiones no pueden subir a dejarnos el agua”, refiere desconsolada.
En efecto, el estudio socioeconómico señala que todas las viviendas del complejo de asentamientos mencionado carecen de aguapotable.
La carencia del líquido es sólo el comienzo de sus problemas.
Las condiciones sanitarias están limitadas por la falta de drenajes, inadecuado manejo de desechos sólidos y carencia de asistencia médica.
Los enfermos deben acudir forzosamente al Centro de Salud de Villa Nueva o al hospital de Amatitlán.
A flor de tierra
La mayoría de viviendas no cuenta con normas higiénicas y lasaguas servidas corren a flor de tierra, lo que provoca contaminación y proliferación de zancudos y moscas.
El 33 por ciento de las casas tiene sólo letrinas, perforadas por los jefes de familia, sin control de aguas negras.
Se calcula que el 74 por ciento de los residentes arroja las aguas servidas a la calle.
Alto riesgo
La Municipalidad de Villa Nueva está preocupada por el riesgo que correnlos pobladores de los asentamientos, pues las viviendas están ubicadas en terrenos desprovistos de protección forestal, indica Humberto del Valle, relacionista público de la comuna.
Durante la crisis provocada por el huracán Mitch, en 1998, cuatro personas perecieron por deslizamientos producidos en el área.
Pero en la estación seca el problema es otro. El polvo aumenta los focos de enfermedades...