Benito Juarez

Escuela Secundaria Técnica 64
Alumno: Miguel Paz Pérez
Profesora: Teodora Teresa Gonzales Pérez
Materia: Historia
Grado: 3º Grupo: “H”
Turno Vespertino
Ensayo de la vida de Benito Juárez

Benito Juárez
“El respeto al derecho ajeno es la paz”
Benito Pablo Juárez García, don Benito Juárez, vio la luz el 21 de Marzo de 1806 en Guelatao, un pueblecito de solo 20 familias, escondido en lasierra oaxaqueña y con una única ventana al mundo exterior gracias a su cercanía con el pueblo de Santo Tomás Ixtlán.
Sus padres, Marcelino Juárez y Brígida García eran, según sus palabras, “indios de la raza primitiva del país”, lo que era natural en una provincia como Oaxaca, cuya variada orografía aislaba a pequeños poblados completamente indígenas –predominantemente zapotecas y mixtecas, perotambién de otros grupos lingüísticos-, cuya cohesión étnica les había permitido conservar gran parte de la autonomía de la corona española había otorgado a los pueblos indígenas durante el virreinato.
A pesar de nacer en ese rincón remoto de la república mexicana, dentro de una familia perteneciente a una de las etnias monolingües oaxaqueñas, la vida de Benito Juárez transcurrió paralelamente ala de la nueva nación; pudo aprovechar las nuevas oportunidades que esta ofrecía, a pesar de las profundas desigualdades de su sociedad.
Para 1806, apenas con 3 años, el niño Benito quedaba huérfano y en el virreinato había despertado las inquietudes que daría inicio a la lucha independentista.
En aquel rincón aislado de Oaxaca, apenas llegaron noticias de la lucha que ensangrentaba a la NuevaEspaña. El tamaño del poblado lo salvaguardaba de las tropas realistas e insurgentes, de manera que el niño creció ajeno a esos eventos. El huérfano pasó a vivir con sus abuelos primero y después con un tío. El mismo Juárez dejo constancia como su tío le enseño a leer, insistiéndole en “lo útil y conveniente que era aprender el idioma castellano”, y sus deseos de que se hiciera eclesiástico.Benito creció cumpliendo con las labores del campo, pero su tío le había despertado el interés en instruirse y soñaba con aprender todo lo que no sabía, lo que no era fácil en ese rincón de la sierra. A pesar de los empeños de los reyes Borbones para hacer que en todas las parroquias se instalara una escuela de primeras letras, ni en Guelatao ni en ixtlan se establecieron, por lo que los padres quequerían que sus hijos se educaran los llevaban a Oaxaca, y cuando no podían pagar la pensión, los ponían a servir en casas particulares “a condición de que los enseñen a leer y escribir”. Esto hizo que Benito le insistiera a su tío que lo llevara a Oaxaca donde podía aprender, y según él escribió.
Con apenas 12 años el joven Benito decidió fugarse de Guelatao. El 17 de diciembre de 1818, muytemprano, Benito caminó a la ciudad de Oaxaca donde llego esa misma noche. Su hermana maría Josefa trabajaba como cocinera en la casa de don Antonio Maza, y hacia allí se dirigió. No es difícil imaginar a Benito con su calzón blanco, absorto con la primera ciudad que conocía. Las bellas y grandiosas construcciones deben haberlo maravillado y sentirse empequeñecido, pero también acrecentarían sussueños de superarse para estar a tono con todo lo que significaban.
Alojado en la casa de los señores Maza por unas semanas, trabajo en los cuidados de la granja con dos reales diarios de salario, lo que le permitía sostenerse mientras encontraba una casa adonde servir. Su buena estrella o llevo a encontrar un protector en “un hombre honesto y muy honrado que ejercía el oficio de encuadernador yempastador de libros que vestía el habito de la orden tercera de San Francisco, do Antonio Salanueva”. A pesar de ser muy devoto, “era bastante despreocupado y amigo de la educación de la juventud”, pues era constante lector de ilustrado padre Feijoo.
Salanueva le ofreció enviarlo a la escuela, lo que hizo recordar a don Benito en sus Apuntes para mis hijos, “de ese modo quede establecido en Oaxaca...