Bibliografia De Vinck

El folklore lacustre del Christiano
Ernesto Montiel
Maracaibo, noviembre del 2011.
Cada vez que Christian Vinck hacía una pintura que le gustaba mucho, o en la que sabía que había llegado a un lugar nuevo, decía: “Hice un milagrito”. Eran los años de pintar compulsivamente, en pequeñísimos e indiscriminados formatos, en un taller tan íntimo, que lo tenía en su propio baño. Eran quizás los añosen los cuales las palabras que Hugo Figueroa Brett le dijera de niño: “la escuela mata a los pintores”, lo fuesen formando con el ímpetu del hágalo-usted-mismo, con ese impulso vital de pintor popular; con un pulso bombeante y constante por el que hoy puede aseverar: “el óleo es la sangre de la pintura”.
El haber nacido en Maracaibo, así como el hecho de ser descendiente de holandeses y marabinos,es una condición que se manifiesta como doble: por un lado, presenta el arraigo y la pertenencia a este territorio, y por otro, una curiosidad de viajero que también tiene visos de inmigrante; como de ser uno de “los que vinieron de otra parte”. Posiblemente por esto último trata con una especial empatía, y hasta con algún modo de identificación a algunos de sus sujetos: los alemanes que seestablecieron en Maracaibo a finales del siglo XIX, o el pingüino que apareció en la ciudad a mediados de los 1950s. Pero sin duda, es por saberse de esta tierra, que siente la necesidad de contar viejas historias locales: “Pintar para echar cuentos, como hacer pinturas del lejano oeste para recordar historias olvidadas”.
Ailuz Zapara es una colección de imágenes en torno a Maracaibo y su lago, hechaspor alguien que se considera a sí mismo un coleccionista de imágenes. Así, esta práctica/modo de trabajo, hace que las piezas que se muestran sean en su mayoría re-interpretaciones de documentos, de obras de difusión, de guías turísticas y de anécdotas. Son piezas donde las imágenes, como registros de la Historia, han sido utilizadas como modelos para ser pintados. Toda colección tiene su factorafectivo, y lo que Christian colecciona no sólo lo tiene en lo que es coleccionable, sino también en su procedencia. Entonces, las historias de las imágenes de la Historia, son también la Historia de él mismo.
Esta consciencia histórica, también se alimenta de una investigación que constantemente revisa la historia de la pintura, una que comenzó con Cy Twombly y Martin Kippenberg, y que hoy en díacomenta a Juan Lovera y a Martín Tovar y Tovar. “Dicen que la pintura es de otra época, pero para mí la pintura es infinita y nunca me deja de asombrar”; y pleno de este fervor, este artista es un viajero en el tiempo, uno que transforma a la memoria en materia del presente.





Espontaneidad pictórica, pinceladas desbocadas
María José Morr
Revista ODCaracas Live, Sección Por Amor al Arte, Octubre2009.
Christian Vinck es un joven pintor marabino que trae en sus manos una propuesta pictórica interesante e irreverente, en la que converge la preocupación por la técnica y el rigor que ésta conlleva mezclado con la espontaneidad que refleja su sentimiento y picardía. Vinck, nos depara a través de sus piezas mundos y escenas coloridas llenas de energía, sus trazos están salpicados de ingenuidadque contemplan mensajes cargados de anécdotas, recuerdos y sencillez. Su obra tiene la particularidad de contar historias, abre la puerta de un mundo poco tradicional pero a la vez familiar, nos expone lecturas atemporales que nos enseñan con timidez su imaginación.
A través de sus cuadros Christian rescata objetos curiosos que tal vez nunca alguien imaginó podrían ser apreciados en una obra dearte, exponiéndolos a miles de interpretaciones ingeniosas y refrescantes, como unos dientes de vampiro de los que se colocan en las piñatas, una libreta, la cédula de identidad, una enciclopedia, un perfume o un paisaje, concebidos de una manera llamativa que revelan la particularidad del estilo de Vinck.
Su talento ha formado parte de importantes exposiciones colectivas a nivel nacional e...