Bien

—¡Bien! Vamos...— Exclamó con alegría, era un buen día, el 14 de febrero día del amor y de la amistad o también conocido como San Valentin era un día para celebrar el amor y era lo que sentía por su esposo MinHyuk, el cual vivía en una casa bastante lujosa, algo a lo que Max no estaba muy acostumbrado, "demasiada tecnología" decía el aun que no podía negar que la limpieza de su novio le ayudababastante ya que él era un desordenado de primera y extrañaba vivir con su esposo.
Ese día había preparado todo para su amado, un hermoso regalo, un hermoso día y un hermoso esposo ¿que más podía pedir? Era hora de ir a su casa, primero envió un mensaje para que su esposo estuviese pendiente de que llegaría en cualquier momento, sólo uno rápido. "Ya voy mi amor" eso decía el mensaje y después deguardar su móvil comenzó a caminar en dirección a casa de su amado esposo, no podía negar que estaba algo nervioso.
No quería parecer un vago, así que como su esposo era alguien de negocios y él solía siempre vestirse algo urbano, se tomó el día para vestirse algo elegante para visitar a su chico, una caja y un ramo de flores rosa adornaban sus manos, las jóvenes chicas lo miraban con sonrisas eimpresión al pasar de aquella manera por las calles hasta el distrito donde estaba la casa de su esposo, miró aquella residencia, era bastante armoniosa a comparación de la suya y fue entonces cuando se acercó a la puerta del chico, no tardaría en llegar lo demás que había planeado así que espero antes de tocar la puerta.
No tardaron ni segundos en llegar, una camioneta con grandes bocinas que ledejaron los encargados y se retiraron, era rentada ya que Max apenas podía pagar ello. Entró a la camioneta, era la más lujosa que pudo conseguir y pagar a duras penas, pero su esposo merecía lo mejor... al menos él se esforzaba en darle a su esposo todo lo que tenía en detalles y de más y ello le gustaba, la sonrisa de Paris lo era todo para el. Colocó su memoria en el reproductor de la camionetapara poder hacer sonar esa canción que le quería dedicar a su amado esposo y que este saliera a ver, bajó de la camioneta para que al asomarme lo viera y supiera que aquella especie de serenata era para él, Paris.
Dorothy
Desde muy temprano se había levantado, a pesar de aun no tener empleo ni nada mas en que ocuparse además de él, el despertar temprano era a lo que estaba acostumbrado además de queel sol en el rostro, solo un pequeño rayo sobre aquel le molestaba. Salió a correr por el distrito, también hizo ejercicio aprovechando el simulado Gym en el parque de la zona, «es una fortuna que cuente con lo necesario» se decía, le agradaba aquel ligar, seria perfecto para cuando en el futuro tuviera hijos junto a su esposo. Ahora que a sus pensamientos llegaba su esposo, tenia que contarlemas sobre de él, ni siquiera sabía sobre quien era, de donde venía ni nada mas allá , esperaba que no se arrepintiera después su amado de haberse casado, con lo que tenia que contarle cualquiera.

Tras regresar a su casa, tomó una relajante ducha, algo larga peto le había venido como anillo al dedo después de ejercitarse bajo el sol, de nuevo el condenado sol molestando. Se vistió de forma sencillapero elegante como siempre, entro a aquel cuarto destinado a ser su armario, donde se había colocado una pantalón blanco ajustado para vestir y una camisa violeta a cuadros y a la medida y con los últimos dos botones libres, respecto al calzado, uso un par de zapatos café sin calcetas, sin olvidar su par de gafas oscuras.

Poco después de haber estado listo, preparó comida para cuando su esposollegara, sabia que iría a pesar de que este no le hubiera dicho nada pero después lo confirmo al recibir un mensaje de aquel. Mientras ahora le esperaba de forma segura, seguía cocinando, su amado era de buen comer, sabia hacer unas costillas en salsa BQQ que seguro serian del total agrado del otro, también una ensalada con frutas y verduras pero sin duda el postre no podía faltar, podía ser...