Biografia de alguien que no soy yo
Por: Sebastián De Zubiria cód. 2070833
Según las barreras del tiempo pasan, y los rostros de todas esas personas que llegas a conocer envejecen, algunos para bien y otros para mal, nos encontramos en un ir y venir de sentimientos, algunos de amor, otros de rabia y simplemente algo de culpa ante todo lo sucedido mientras la vida de un joven corre sinparar. Y al pasar del tiempo los recuerdos llenan de nostalgia nuestros corazones, no tanto por lo que se vive, si no por las personas que son protagonistas del diario vivir de nuestras propias novelas.
¿Acaso nuestros buenos momentos se dignan a las eficiencias emocionales ligadas a esas personas que vierten en nuestro interior las bases de buenos sentimientos? He de ahí la calidad de vida quellevamos con respecto a lo que se puede llamar amor, y se muy bien que nadie ha sido artífice falsificado de eso, pero siempre se han llevado buenos recuerdos de esos momentos y que al llegar a un final simplemente eso queda “buenos recuerdos”. El inconsistente rechazo de los hombres a la aceptación del amor me ha llevado a mostrar facetas de las cuales no estoy muy orgulloso, pero que si me handejado ver una buena cara personas desde que estaba en el colegio, ese maravilloso momento que todo joven destaca en su vida, y de ahí aprende realmente el significado de lo que es querer a alguien con el corazón.
Recuerdo la primera vez que dije te amo, fue en aquellos días donde aprendía a querer a alguien diferente a la familia, pero también recuerdo que ella nunca supo lo que yo podríasentir, no se si fue por miedo o por que simplemente era muy joven e influenciable y de pronto estaba confundido acerca de ese tema. Vivía fascinado con esas ilusiones de cariño que no conocía, junto con algo que muy dentro de mí me faltaba, de pronto eran ilusiones o fantasías con anhelos de cariño que me hacían falta, y el cual todavía es un sobreviviente en una pared cercana a mi casa, cuando vivíaentre mis sentimientos plasmados en un vandalismo que para mi era primordial ya que me dejaba ver durante cada día lo que por mucho tiempo nunca pude olvidar; esa mujer de rubia cabellera, ojos que penetraban hasta lo mas profundo de mi cordura, y me hacia alucinar con su suave fragancia y un timbre de voz que hacían desfallecer hasta el mas duro de los hombres, esa mujer que por primera vez llevomis sueños a un mundo real, y que por fin me dejo el dulce sabor del amor en la boca.
Recordar su nombre me lleva a los más íntimos recuerdos que me enseñaron esa supuesta experiencia basta que tengo de los sentimientos. Elizabeth se llama, ese primer amor que todos recuerdan con orgullo, pero que el ego masculino no lo deja a la luz para no mostrar debilidad hacia un mundo de machismo endonde todos los hombres somos infieles, pero donde no saben que alguna vez habremos podido morir de amor.
Era la víspera de mi juventud, si a mi edad puedo llamarlo así sin quedar como un joven crecido a destiempo, pero para mi ha pasado mucho desde ese primer encuentro. Todavía jugaba con mis amigos y empezaba a recorrer los alrededores de donde vivía, junto con un compañero muy preciado para mí,Gustavo era su nombre, y justo ahí, en ese momento la vi frente a frente. No se si me comporte como un idiota, o si mi mirada dejo ver lo encantado que quede con esa mujer tragándome la pena por primera vez en mi vida y llegar a saludarla sin temor alguno, y para ser sincero, la química se noto entre los dos a tan corta edad, dejándonos llevar por las palabras y el sonrojamiento mutuo con tan solotocarnos, hasta que por primera vez llegue al cielo con un beso en la mejilla.
Pasaban las noches, y mis ojos mirando a las estrellas se hacían a la ilusión de poderla ver de nuevo, rogando que los días, las horas o tan solo los minutos no sonaran tan constantemente en mi cabeza, convirtiendo mis ansias en algo enfermizo y desesperante. Pero las palabras de ese leal amigo carcomieron mi...
Regístrate para leer el documento completo.