Botero

Introducción
La del realismo ha sido una de las búsquedas centrales en la historia del arte occidental. Un gran número de artistas desarrollaron el virtuosismo técnico necesario para reproducir imágenes del mundo tal cual lo veían y procurar crear la ilusión bidimensional de los objetos valiéndose del equilibrio de proporciones, el manejo de la luz, la perspectiva y el volumen, entre otrosaspectos. Sin embargo, varios de ellos han logrado al mismo tiempo darle un sello personal a su obra: representan en ella la realidad pero también la interpretan desde una mirada subjetiva. Un caso especialmente interesante es el de la obra del colombiano Fernando Botero.
Botero replantea con su pintura la figuración y el canon de belleza clásicos desde una visión muy particular, al punto de lograrconfigurar con ella un universo propio. El imaginario de este universo se sostiene en la exageración del volumen en sus dibujos, pinturas y esculturas, un recurso con el que el artista representa igualmente al torero que está siendo corneado en plena corrida y a la mujer asomada por una ventana, al obispo que camina cerca al río o las frutas que hay sobre una mesa listas para consumirse.
Boterodescubrió muy pronto que mediante la expansión de los volúmenes y la alteración del canon anatómico no solo ganaba libertad para pintar, sino que podía dotar de mayor coherencia a la composición general que deseaba representar en casa caso.
Mandolina sobre una silla / en rojo y en azul, 1957
Óleo sobre tela (119.5 x 94.5 cm)
Para comprender la obra de Fernando Botero es importante tener en cuentavarios aspectos artísticos y técnicos que el artista pone en acción para tratar los temas de sus cuadros. En primer lugar, Botero mismo nos explica que él descubrió la posibilidad de aumentar el volumen de las figuras a través de la alteración de las proporciones, un recurso que significó un gran vuelco para su obra: “En ese entonces mi interés por el volumen estaba dentro del sentimientoitaliano. Era lógico, había amplitud en el dibujo y exuberancia en el contorno. Pero un día, mientras dibujaba una mandolina de rasgos generosos, en el momento de hacerle el hueco al instrumento, lo hice muy pequeño y la mandolina adquirió proporciones fantásticas. Mi talento fue reconocer que algo había pasado” (Escallón, citando testimonio del artista, 1997).
Canasta de frutas, 1997
Óleo sobre lienzo(154 x 204 cm)
Los bodegones de Botero están llenos de referencias. En algunos casos se trata de referencias temáticas foráneas, pero en muchos otros se percibe cierta nostalgia de su tierra natal, especialmente en las fechas que coinciden con sus estadías en otros países, donde predominan los elementos locales. La acumulación de productos diversos, el carácter corpulento de las formasrepresentadas y la riqueza cromática, son las características más destacadas de sus bodegones.
Desde finales de la década de 1950 Botero se interesa por las frutas como elementos centrales de sus composiciones, y las pinta insistentemente con múltiples variaciones, explorando armonías geométricas y cromáticas. Como se aprecia en la Canasta de frutas(1997), Botero recrea los exuberantes frutos de lanaturaleza con un especial énfasis en los volúmenes y una variedad de colores y texturas; pero el artista no pinta estas escenas basado en la observación directa, sino que se concentra en la experiencia sensorial:
“Si quiero pintar una naranja no la pongo frente a mí. Prefiero comérmela y después la pinto”.
Naranjas, 1997
Óleo sobre lienzo (161 x 200 cm) 
“La gran prueba de originalidad del artistaes que pueda pintar una naranja distinta. La naranja es la forma más simple y si uno logra darle realmente un sello personal, eso es lo importante (...) esa es la prueba de fuego de la pintura”, nos dice Botero.
En los cuadros de bodegones con frutas que pinta el artista, más allá de ser una referencia tropical a Colombia y Latinoamérica, la naranja cumple una función geométrica y cromática...