brighitt gomez
Nota del editor: esta nota fue publicada por primera vez el 21 de Julio de 1986 en Fortune. Como Bro Uttal dijo al editor de Fortune,Marshall Loeb, en aquel entonces, "dudo que se haya publicado una historia como ésta antes, y dudo que se publique de nuevo".
Hacerse público es uno de los principales sacramentos del capitalismo,concediendo una súper riqueza a algunos empresarios talentosos y suertudos. De las más de 1,500 compañías que han atravesado el rito de hacerlo en los últimos cinco años, pocas han disfrutado de laamistosa bienvenida de los inversionistas como lo hizo Microsoft, el fabricante de software para computadoras personales con base en Seattle.
Sus acciones, vendidas en 21 dólares el 13 de marzo,crecieron a 35.50 dólares en el mercado de mostrador antes de fijarse recientemente en 31.25 dólares. Microsoft y sus accionistas recaudaron 61 millones de dólares.
El principal ganador fue William H.Gates III, cofundador y presidente de la compañía. Sólo recibió 1.6 millones de dólares por las acciones que vendió, pero al hacerse pública la participación que tiene de 45 por ciento, colocó unvalor de mercado de 350 millones de dólares.
Como prodigio del software, ayudó a crear Microsoft cuando aún era un adolescente. Y a sus 30 años, quizás es uno de los 100 estadounidenses más ricos.Gates cree que otros empresarios podrían aprender de la experiencia de Microsoft en crear lo que algunos analistas consideran "el negocio del año", por lo que invitó a Fortune a echar un vistazo delarduo proceso de 5 meses. Las compañías no suelen permitir un vistazo tan cercano a una oferta porque temen que la Comisión de Mercados y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) los acuse de ofrecer...
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