BULLYING ¿Reflejo de la violencia social?
“No quiero ir a la escuela” puede ser la primera manifestación de que un chico está en problemas. Esta frase, acompañada de signos tales como doloresimprecisos y malestares diversos, suele aludir a cosas que son vivencialmente más importantes para niños y adolescentes: la relación con el otro.
En la actualidad, el fenómeno del acoso escolar,conocido como bullying y definido como un comportamiento agresivo e intencional que supone un desbalance de poder repetido a lo largo del tiempo, se ha convertido en un problema social que afecta aniños y adolescentes en etapas escolares y va tomando auge cada día en las escuelas tanto públicas como privadas. Sin embargo, el interrogante sobre cuál es el verdadero origen del acoso escolar y quiénesdeben actuar ante un caso de bullying sigue siendo tema de debate. Frente a quienes sostienen que los jóvenes son los únicos responsables nos preguntamos si, acaso, este fenómeno no es unaconsecuencia de la violencia social vivida a diario en nuestra sociedad.
Ante la gran tarea que implica hacerse cargo del lugar que cada uno ocupa en este entramado problema el camino más conveniente pareceser “mirar para otro lado”. Así, habitualmente, nos encontramos con directivos que sostienen que en sus instituciones no hay problemas disciplinares, docentes que no saben cómo actuar ante hechos deviolencia dentro del aula, alumnos que creen que estos episodios son sólo bromas inofensivas, y padres desinteresados que no prestan atención al tema, siempre y cuando, sus hijos no sean víctimas.Evidentemente y aunque se reste importancia al asunto o, incluso, se lo oculte, el acoso escolar es un indicador de falta de salud de la sociedad en la que está inserta la escuela, que no hace nimás ni menos que reflejar los valores que predominan en ésta. Las causas de violencia son múltiples y su origen no puede ser atribuido propiamente al sistema escolar. Los jóvenes, en pleno proceso...
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