BUSCANDO UN MODELO ECONOMICO EN AMERICA LATINA
El libro está compuesto de cinco partes. La primera motiva el trabajo comparativo que inspira la obra y presenta unbosquejo de los objetivos del libro. Las partes segunda, tercera y cuarta presentan detallados recuentos de la evolución económica e institucional de Chile (1973 en adelante), Cuba (desde 1959) y Costa Rica (desde 1948). El material empírico presentado es vasto, con un importante esfuerzo de compatibilización para fines comparativos. Asimismo, la explicación de la evolución de las estrategias y políticasasí como las instituciones en que estaban insertas hacen que cada sección pueda servir como libro aparte para entender cada país por separado.
Con todo, la parte más interesante para este lector fue la quinta, donde se compara en forma sistemática _con base en 20 a 30 indicadores_ el desempeño relativo de los tres países en variables relacionadas con el crecimiento, la macroeconomía, el sectorexterno, el empleo, los salarios, la educación, salud y vivienda. El análisis permite sacar conclusiones de importancia para los demás países en desarrollo respecto a las implicancias de privilegiar los objetivos económicos o sociales sobre los políticos (Chile bajo Pinochet y Cuba, respectivamente), o de intentar armonizar lo económico con lo social bajo democracia (Costa Rica y Chile postPinochet).
De las muchas conclusiones de interés quisiera resaltar tres. Primero, al finalizar el período, Chile muestra un mejor nivel económico que Costa Rica, seguido de lejos por Cuba; mientras que Costa Rica muestra un mejor nivel de indicadores sociales, seguido de cerca por Chile y con Cuba en tercer lugar. No obstante, Chile muestra una mejora relativa en todo el período tanto en loeconómico como en lo social, con Costa Rica en segundo lugar y, de nuevo, Cuba en el tercero. Si bien el relativamente modesto desempeño así como el actual nivel cubano se deben en gran parte a la crisis poscolapso de la URSS, no es menos cierto que su aparentemente sólido desempeño anterior se debió a la enorme ayuda soviética (estimada en US$65.000 millones, el doble de lo que costó el embargo según lasautoridades cubanas).
Segundo, el libro muestra que muchas de las deficiencias de cada país/modelo fueron endémicas no tanto del modelo económico en sí sino del sistema político en que se engendraron. La severidad de las depresiones de 1974/75 y 1982/83 en Chile se debió en buena parte al dogmático antiintervencionismo de los neoliberales chilenos y su supuesto de que el mercado se ajusta adesequilibrios en forma rápida y automática y así hacer caso omiso de señales "raras": tasas de interés real de 25% anual por 6 años, atraso cambiario de 30% y más, desempleo elevadísimo, no por salarios reales altos, sino pese a que éstos habían caído al suelo. Asimismo, pese a que Cuba ha "gozado" de la estabilidad política de una dictadura férrea por ya más de 42 años, ningún país de la región...
Regístrate para leer el documento completo.