cacaca

 Cuando estaba en la pieza de los grandes, Emilia descubrió que no todas las cosas son lo que parecen.
Esa noche ella no había podido dormir sola porquepensaba todo el tiempo en la cosa que había en la silla de los grandes.
Antes que estuviera oscuro ella podía entrar y salir de la pieza de los grandes cuandoquisiera, pero cuando tenía que ir a acostarse el lugar donde dormían los grandes ya no era de ella.
Emilia se preguntó durante mucho rato qué podía darle tanto sustoque no la dejara dormir y de inmediato se acordaba de la cosa que vivía en la silla de la pieza de los grandes.
Aquella noche fue tan l a a a r g a y la puertaestaba t a n
Lejos
Que ni siquiera pudo pararse, abrirla y ver qué era esa cosa, por lo que tuvo que llamar a su mamá para que la tomara en brazos y sela llevara.
Los grande no entendían por qué tenía tanto miedo y ella no podía contarles
(los grandes nunca entienden esas cosas,
creen que todo estan fácil)

Pero Emilia se armó de valor y le preguntó a su papá qué era lo que vivía en la silla por las noches.
Su papá no entendía bien
(los grandes nuncaEntienden esas cosas)

Así que ella le mostró la silla y le explicó que por las noches, cuando todos apagaban la luz, vivía ahí una cosa que no se movía ninada, pero que daba mucho, mucho miedo.
Su papá por fin pudo entender qué era lo que Emilia le quería decir y, arrodillándose, le contó que cuando él se iba a acostardejaba su ropa encima de esa silla y, como la luz no estaba encendida, ella no podía ver lo que era.
A veces, le dijo, las cosas no son lo que parecen.