Calentamiento global

Introducción.

Cuando despertamos cada día, miramos a nuestro alrededor y vemos todas esas cosas que nos son familiares, todas esas cosas que nos traen recuerdos quizá de días, de semanas, meses o años anteriores; y sentimos un no se qué especial, que luego nos lleva a decir alegremente: “esta es mi casa”. Y nos sentimos a gusto con esa sensación de pertenecer a un lugar en especial, un lugardel cual formamos parte importante, un lugar del cual nos sentimos en cierta forma creadores.

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No tenemos la misma sensación, en cambio, cuando despertamos y nos damos cuenta que ya no todo está en su lugar: quizá la pintura de las paredes está desgastada y trizada; quizá al escritorio en donde antes estudiábamos le faltan cajones y está entero carcomido por las termitas; quizá lagente con la cual hemos vivido todo este tiempo ya no es la misma de antes, y ahora se comporta de manera diferente. En este caso, ya no nos sentimos tan a gusto y perdemos esa atracción que tan fuerte sentíamos por ese lugar.

Pero muchas veces no nos damos cuenta que está ocurriendo esto, que nuestra casa ya no es la misma de antes. Como la mayoría de las veces estos cambios son graduales,entonces van pasando desapercibidos por nuestra vida y nos vamos acostumbrando a ellos creyendo que todas las cosas siempre han estado de ese modo. Más notorio es este suceso cuando las cosas que cambian no son aquellas por las cuales estamos todo el tiempo pendientes, e incluso mucho más peligroso es esto cuando esas cosas son partes fundamentales, o cimientos de nuestra casa. Seguimos nuestra vidacomo si nada, sin darnos cuenta de esta verdadera amenaza que tenemos, y nos preocupamos de cambiar o arreglar detalles del adorno de ella o cosas totalmente indiferentes a su subsistencia. El caso de los autos es muy esclarecedor para explicar mejor esta idea: una vez comprado el modelo deseado, el dueño no hace más que adornarlo con perritos que mueven la cabeza o pinos de olor; le compra unaradio y parlantes nuevos; lava el auto lo más seguido posible, le pone luces de colores y calcomanías para que se vea mejor, etc. Pero ¿qué tan seguido se ve a ese dueño revisando los niveles de aceite, revisando el motor, revisando el estado de los neumáticos, etc...? es más: es impresionante la cantidad de veces que vemos gente con el auto parado a un costado de la calle por ¡una panne de bencina!Damos gracias entonces, por que existen los mecánicos, esa gente que no le importa tanto la apariencia del auto, sino su funcionamiento; esa gente a quien dejamos en sus manos que nuestro auto siga funcionando, para así preocuparnos nosotros tan sólo de su aspecto; esa gente a quien le echamos la culpa cuando nuestro auto falla, sin darnos cuenta que quienes realmente produjimos esa falla fuimosnosotros mismos al no preocuparnos de lo que realmente importa.

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Ahora se preguntarán ustedes ¿a qué voy con tanta introducción y ejemplos de casas y autos? Les respondo ahora: a la Tierra. Sí, al planeta Tierra, nuestra verdadera casa, ya no como personas individuales que somos o insertos en una familia, sino como seres humanos, como raza de la cual formamos parte. Así como cada personase identifica con su casa (u hogar mejor dicho, ya que no siempre se tiene lo que físicamente se conoce como casa), el ser humano se identifica con la Tierra (ser humano o terrícola como se le llamaría en una obra de ciencia ficción), porque ese es su hogar, su lugar de origen, y en donde siempre ha vivido. Todas esas grandes hazañas, todos esos descubrimientos, el paso de todas las civilizaciones,toda la poesía, el arte, la filosofía y la historia que conocemos, no ha pasado más que en este minúsculo punto dentro del universo.

Pero al igual que nuestra casa, la Tierra con los años, y a causa de nuestra actividad sobre ella, se ha ido deteriorando en varios aspectos: se han perdido vastas áreas verdes debido a la necesidad de construir nuevas viviendas y la necesidad de contar con...