Caligula

Caligula…La idea de una trayectoria dividida en dos fases más o menos diferenciadas, corresponde precisamente a la visión que presentó Suetonio en su biografía sobre Calígula, ya que es una de lasque más ha trascendido en la historiografía moderna.

Yo no lo veo como una persona trastornada mentalmente que por tal razón obrara de una forma irracional. Hay que incluir a Calígula en el contextode su pretendida forma de gobierno. Así, me inclino por la conocida conclusión del arqueólogo/historiador Mario Attilio Levi y otros autores, en la que parte de este comportamiento se justificaríaposiblemente en un programa de gobierno que mostraba ciertas influencias de modelos políticos orientales, y que por tanto presen taban efectivamente un carácter algo más totaliratista y ostensivo delpoder (en consecuencia podían ser despóticas), pero que evidentemente resultaba muy arriesgado aun para la Roma de aquella época por lo inconcebible e inaceptable en una sociedad de mentalidad eintereses occidentales.

Y es que al fin y al cabo, las influencias orientales se fueron haciendo cada vez más notorias desembocando en una progresiva orientalización del imperio con el paso del tiempo.Calígula simplemente fue un claro exponente en el inicio de esta orientalización, que justamente por reciente, le situó en una postura aun imposible de ser entendida ni aceptada.

Y sin poderseobviar la insistencia de los autores antiguos en sus desmanes, el anterior factor expuesto combinado con una personalidad impetuosa, irreflexiva y ansiosa (se hizo otorgar de un plumazo cada uno de losnumeroso títulos imperiales que Augusto reunió gradualmente tras años de mandato) propio de alguien más bien joven aun (hay que recordar que se le nombró emperador con 25 años) además con tal potestad yprivilegios, y que de esta manera no teme el manejar el poder conforme a sus intereses, pudo constituir la mayor parte, o al menos una porción bastante importante, de la razón de su comportamiento...