Camil
Camila Mancini Vigueras
¿Libertad? Sin duda es una pregunta que me ha tomado bastante tiempo en intentar responder. Es una palabra compleja. No estamos seguros si es un derecho natural, algo que invocamos cuando lo necesitamos, un valor que se concede, que se gana… etc. Existen miles y millones de acepciones para el término. Tras una breverevisión de literatura, es muy difícil casarse o identificarse con alguna de las acepciones, o simplemente coincidir en un alto porcentaje con los que nos dicen. Ésta gran complejidad ha sido objeto de estudio por años, muchos filósofos dedicaron bastante tiempo a pensar en ella y se escribió, se escribe y se seguirá escribiendo. Pero sería redundante volver a revisar la literatura antigua que estádisponible y formarnos una opinión sobre la libertad, y hasta un poco ambicioso pretender generar nuestra propia concepción y ponernos a la altura de los grandes filósofos de antaño.
Con el fin de ser más objetivo el ensayo, éste será guiado por la definición que nos da la RAE (Real Academia Española) “Facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por loque es responsable de sus actos.” Pero podemos sentirnos dueños de nuestra propia libertad? Un sinfín de cuestionamientos se presentan al momento de plantearnos qué tan libre somos. Estamos rodeados de pautas de comportamiento que guían nuestro actuar, que señalan lo bueno y lo malo. Continuaremos este ensayo desde el supuesto de que el hombre nos es del todo libre y que tal libertad es el anhelomás grande de él. Pues negar la existencia de la libertad sería negar la existencia de estas palabras que construyen este escrito. El hombre es libre dentro de ciertos parámetros.
Vivimos en un sistema donde estamos gobernados por normas legales y sociales que coartan nuestra libertad. El Estado cumple un rol fundamental. Este es el que garantiza que se cumplan ciertos derechos, como por ejemploelegir una actividad económica o elegir dónde vivir… ¿pero qué tan cierta es ésta libertad?.
Al momento de ejercer nuestra libertad nos topamos con bastantes situaciones que a simple vista parecen ser normales, pero que si analizamos más a fondo son reales barreras al ejercicio libre de ésta facultad que tenemos los hombres. Dentro del Estado de Derecho, por la misma concepción de él, es pocoprobable que los gobiernos y la ciudadanía actúen con plena libertad. Esto dado por el marco legal fuertemente arraigado ya en la sociedad. El Estado moderno no puede definirse como un ente libre, pues esto iría contra su naturaleza. A lo menos el Estado de Derecho que está sujeto al Principio de Derecho Público “El Estado puede hacer todo lo que la ley señale“ . Éste está sujeto a la Constitución demanera obligatoria y su accionar está normado hasta en el más mínimo movimiento. Pero esta normatividad extrema, hace que los Gobiernos sean muy rígidos y que su actuar no pueda adaptarse a las situaciones que pueden darse. Entonces aparece la sed de libertad, que a mi parecer, genera situaciones donde el funcionario público se deje llevar por su particularidad y se ciegue frente a su función develar por el interés general. Y cómo todo está normado en el actuar de la Administración pública, nos enfrentamos a falta de probidad, ilegalidad y corrupción. Situaciones que sin duda se dan.
El ciudadano, en cambio, puede actuar con absoluta libertad, siempre y cuando la acción que lleve a cabo no esté prohibida por ley.
Pero además de aquello nos encontramos con formas tácitas de coartar lalibertad del ciudadano. Para esto nos centramos en los riesgos, recompensas y castigos. No precisamente refiriéndonos a lo legal, sino a las situaciones informales que se dan en el ejercicio de la libertad, dentro del Estado de Derecho.
No tiene caso analizar las libertades otorgadas por ley, como es el sufragio, es más interesante analizar las que al parecer fuesen aseguradas por la normativa...
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