Campo del conocimeinto
JORGE NORBERTO CORNEJO Gabinete de Desarrollo de Metodologías de la Enseñanza (GDME). Facultad de Ingeniería, Universidad de Buenos Aires, Argentina
1.
Introducción
En el presente trabajo postulamos que la incorporación de contenidos provenientes de la historia, la cultura, el arte y la tecnología puede enriquecer la formaciónde los docentes que dictan materias pertenecientes a las Ciencias Exactas y Naturales y, como consecuencia de ello, el proceso de enseñanzaaprendizaje de los tópicos incluidos en tales disciplinas. La formación integral del docente se reflejará, naturalmente, en una enseñanza también integral, en la que los diferentes temas de cada asignatura serán contextualizados histórica y culturalmente, yrelacionados con las necesidades y aspiraciones del ser humano en cada época. Según Hernández González y Prieto Pérez (2000) uno de los inconvenientes principales que presenta en la actualidad el estudio formalizado de los saberes científicos proviene de su desconexión, que obliga al estudiante a tratar las distintas materias como si fueran unidades en sí mismas. El saber aparecería así desvertebradoy atomizado, sin otorgarle al alumno la oportunidad de entrever una visión de conjunto. De acuerdo con estos autores, la disciplinareidad, se convertiría en un hábito deformado de entender la cultura y la realidad, carente de coherencia y sentido global. Esto se relaciona con una visión meramente operativa del saber científico, en la que se pretende que el alumno aprenda primariamente a operar yformular y sólo secundariamente a comprender. Las consecuencias inmediatas de tal pretensión generan en los estudiantes una carencia de flexibilidad y de profundidad reflexiva y una abundancia de mecanización cuyo resultado último es la pérdida del sentido verdadero del aprendizaje. Por el contrario, la introducción de tópicos correspondientes a la historia y a la cultura en sentido amplio(incluyendo las producciones artísticas y tecnológicas) en la enseñanza de las disciplinas científicas puede favorecer el desarrollo de habilidades de razonamiento y de pensamiento crítico, así como contribuir a una mejor comprensión de los conceptos científicos (Mattews, 1994). Debería mostrarse que el conocimiento científico actual es el resultado de un largo proceso, en el que la construcción ycontrastación de ideas y teorías es constante y se encuentra permanentemente afectada por factores de diversa índole: filosóficos, culturales, sociales, estéticos y tecnológicos, entre otros (Arriasecq y Greca, 2005). Desde esta perspectiva, cada conocimiento científico es la conclusión de un compleja trama de ideas y relaciones construidas en el curso de la historia, y la ciencia es una actividadinseparable de la obra completa de la humanidad. Las nociones de interdisciplinareidad y trabajo interdisciplinario surgen así naturalmente como resultado de la formación integral del docente, y del proceso integral de enseñanza-aprendizaje resultante.
Revista Iberoamericana de Educación (ISSN: 1681-5653)
n.º 43/5 – 25 de julio de 2007 E DITA : Organización de Estados Iberoamericanos para laEducación, la Ciencia y la Cultura (OEI)
Jorge Norberto Cornejo
Speltini y otros (2006) han sugerido que el proceso de enseñanza-aprendizaje de materias científicas debería, hasta cierto punto, reproducir los tres contextos característicos de la actividad científica: el contexto de descubrimiento, el de justificación y el de aplicación, y que el trabajo áulico debería “situarse”, por así decirlo,en tales contextos. La aplicación de este tipo de propuestas, que propenden a una enseñanza menos “dispersa” y más unificada de los conceptos científicos requiere, correlativa y necesariamente, una correspondiente formación integral por parte de los docentes. En síntesis, tanto en la enseñanza como en el aprendizaje, tanto en la formación del docente de ciencias como en la enseñanza misma de la...
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