Canción Del Destierro
En mi país estoy,
en mi casa, en mi cuarto,
en mi destierro.
Leve es el crepúsculo. Apenas
si las cosas existen:
mislibros en el suelo, tibio el aire
encerrado en la luz escondida
en sus hilos de alambre.
Me rodea el silencio y
-alguna vez-
es alegre el destierro.Cuando acaba la noche,
brota el cielo y se asoma
a mi ventana,
el aire me entristece
y enciendo el cigarrillo
del destierro.
A raudales entra laluz:
brilla en mis ojos, se empoza
en las almohadas,
estalla
sobre un vaso con flores
en mi mesa.
Yo vivo sin cesar
en el destierro.
“Lapoesía de Washington Delgado vacila entre la melancolía a que la impulsa la constatación del mundo que el poeta atisba y una invocación de la dicha que debeexistir al alcance de nuestro mundo cotidiano. Lo inquieta un combate silencioso entre ese sentido general, quebradizo, elusivo y melancólico del vivir y el deseoque no termina de formularse, de que la dicha sea también posible para los seres que permutan a cada momento las abstracciones del espíritu por las presionesde la materia no sometida y sus agentes de injuria.
“La dicha tiene un rostro sencillo”, dice Delgado. Pero esa necesaria sencillez con demasiada frecuenciapermanece ajena a las comunes criaturas. Delgado la rescata del otro lado de la muerte, por un escamoteo idea de las anécdotas tristes del mundo, en lasarquitecturas vacías, en los sonidos apagados, en las palabras no dichas, en los sucesos no acaecidos”
http://www.hispanista.com.br/revista/poemario_soto_127.pdf
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