capitalismo
El documental empieza con una versión de cómo el imperio romano se hundió cuando le faltaron losesclavos. Y precisamente eso es lo que el capitalismo hace por medio mundo: buscar esclavos que permitan a los ricos ser más ricos. Aunque sea a costa de empobrecer la clase media a base de estratagemas tan complejas como las llamadas subprimes o hipotecas tóxicas, a mayor gloria de los ingeniosos financieros que crearon la posibilidad de convertir en polvo el esfuerzo de miles de ciudadanos quecayeron en los tentáculos de las mismas. Ahí está en primera línea Michael Moore para presentar en primicia cómo gente que ha trabajado duro, pierde sus más de cuarenta años de esfuerzos. Y el sistema no tiene piedad.
El capitalismo basa su estrategia en provocar elconsumo al coste que sea, o en ejecutar un servicio al precio que sea, como la reeducación de menores encerrados por meses por purasnimiedades. Y es justamente este consumo la energía que lo alimenta. El filme no entra a plantear las consecuencias ambientales que se pueden apreciar por todo el planeta causadas por un sistema basado en el expolio de los bienes naturales para enriquecer a unos pocos. Tampoco entra el filme en las consecuencias para las futuras generaciones que van a ver cómo un planeta finito les deja sinposibilidades para el futuro, ni para seguir progresando, ni tan siquiera de forma sostenible.
En el fondo, Capitalismo, una historia de amor es un análisis de cómo la política no es más que un refugio de los poderosos para seguir dominando el mundo. Lo muestra con una irreverente documentación en la que sitúa a ex directivos de bancos y grandes corporaciones en sitios claves del gobierno americanopara, desde éstos, lanzarse a promover regulaciones que les favorezcan y puedan seguir así en el poder. Porque de esto trata el capitalismo, de cómo seguir en el poder, y seguir ganando más y más.
El propio director afirma que “en el mundo no hay suficientes toallitas desinfectantes para limpiar Wahsington” aunque sin embargo, no se adentra en los entresijos del capitalismo más salvaje quedenuncia la periodista italiana Loretta Napoleoni en Economía canalla. Pero es evidente, que el análisis del filme de Michael Moore peca de ingénuo en algún momento, al situar a Europa casi como un paraíso comparado con el infierno yanqui. Aunque Moore está convencido, y éste es el objeto de su documental, que hay que mostrar esta verdad incómoda que es el sistema capitalista actual en el que estamosmetidos hasta el tuétano de los huesos. Así, advierte que aunque Barak Obama ganó las elecciones a presidente, uno de sus principales donantes fue el entramado de Goldman Sachs, que llevan lustros en el ojo del huracán de la tenaza capitalista sobre la clase media y amenza pulverizarla.
El director Michael Moore frente el edificio de la Bolsa de Nueva York, llamándoles para que salgan para serdetenidos por los crímenes capitalistas.
El ejemplo de los pilotos de aviación que cobran menos que un responsable de una tienda de comida basura sorprende. Especialmente en España, un país donde sólo los controladores aéreos se llevan un salario que dobla al de sus homólogos de otros países de la UE, y supone un 70 % del gasto de navegación aérea de AENA. Pero lo cierto es que es revelador el...
Regístrate para leer el documento completo.