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etnológica1
Claude Lévi-Strauss
Parece obvio que la etnología disponga de plaza re-
servada en una compilación consagrada a las cien-
cias humanas. La etnología,en efecto, tiene por objeto de
estudio al hombre y en principio sólo se distingue de las
demás ciencias humanas por lo acusadamente alejado, en
espacio y tiempo, de las formas de vida, pensamientoy
actividad humana que trata de describir y analizar. ¿No
hacía otro tanto, con una simple diferencia de grado, el
humanismo clásico al intentar reflexionar acerca del
hombre desde aquellascivilizaciones diferentes a las del
observador, y de las que la literatura y los monumentos
grecorromanos le mostraban el reflejo? Pues éstas consti-
tuían, por aquel entonces, las civilizaciones másdistantes
de entre aquellas a las que se podía tener acceso. Las hu-
manidades no clásicas han intentado extender el campo
de acción, y la etnología, desde este punto de vista, no ha
hecho sinoprolongar hasta sus límites últimos el tipo de
curiosidad y actitud mental cuya orientación no se ha
modificado desde el Renacimiento, y que sólo en la ob-
servación y en la reflexión etnológicasencuentra definiti-
vo cumplimiento. De esta manera, la etnología aparece
como la forma reciente del humanismo, adaptando éste a
las condiciones del mundo finito en que se ha convertido
el globoterrestre en el siglo XX: siglo a partir del cual de
hecho, y no sólo de derecho, como antes, nada humano
puede ser ajeno al hombre.
Sin embargo, la diferencia de grado no es tan simple,
pues va unida auna transformación obligatoria de los mé-
todos a emplear. Las sociedades de las que se ocupa el et-
nólogo, si bien tan humanas como cualesquiera otras, di-
fieren, sin embargo, de las estudiadaspor las humanidades
clásicas u orientales, en que en su mayor parte no conocen
la escritura; y en que, varias de entre ellas poseen bien
pocos, por no decir ninguno, monumentos representa-...
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