Caronte y yo... yo y caronte

He muerto, pero estoy consciente, me doy cuenta que en mis ojos, en ambos ojos... Hay una moneda de plata y otra más bajo mi lengua.
Veo un rio de apariencia fúnebre, algo a lo lejos en él, semueve. A medida que se acercaba, divisaba un bote, llevaba a un hombre triste en él, y el que lo dirige, cubierto por un manto negro completamente, lo que me impedía divisar su rostro con claridad.Recuerdo en vida, haber leído algo sobre el… “Caronte, te lleva a través del rio Aqueronte, de una a tres monedas de plata es tú paga, y tú llegada: El Inframundo, Reino de Hades.”
Me he dado cuenta de quehe sido una mala persona en vida, Caronte se acerca en su bote poco a poco y yo perdido en mis pensamientos. El bote se detiene a orillas del rio, Caronte lo golpea con su vara, un golpe seco ydirecto, lo que me saca de mis pensamientos a la “realidad” en la que me encuentro. Él extiende su mano, no entendía que quería, le pregunto. Hace un gesto señalando mi mano derecha y vuelve a extender lasuya, recuerdo entonces que en ella tengo las monedas “Caronte, te lleva… por una o tres monedas de plata.”
Yo no quiero ir al infierno, no sé qué hacer para poder salir de donde me encuentro, no veoventanas ni puertas, en el tiempo que he estado acá, nunca me fije que estaba en

un semicírculo de tierra de más o menos 4 metros de diámetro. Sudando frio me volteo temiendo lo peor, y asísucedió, tras de mí una pared de piedra sin fin visible.
Aun Caronte espera, en el bote con su mano extendida a que deje caer mis monedas, sé que he sido una mala persona en vida, pero ahora, que de eso yano me queda nada, me aterra ir al Infierno, no creía que existiera y ahora que estoy aquí, no sé qué hacer, no quiero ir.
Caronte sigue esperando, con la mano extendida, pero ¡¿cuánta paciencia me hatenido este ser?!
Que aun ¡no se ha ido! … ya no hay nada que hacer, no hay opciones, no hay salidas, no hay atajos. Me acerco a la balsa, extiendo mi mano derecha y dejo caer las monedas en su...