Carta a Adriano



Abuelo de mis mas seguros secretos:
Hay algo que aún no te he contado pero que tú, con tus sabias palabras has sabido hacerme entender, he pasado las últimas doscientas noches pensando en comorecuperar a la mujer a la que quiero consagrarle mi vida, pero como tú lo has dicho los “vínculos irrompibles se desatan pronto”, pronto y sin avisar, no he querido contártelo antes porque quierorecibir de ti cuanta enseñanza me des, pero esta mujer, esta mujer de pelo color amapola, y piel miel, se ha entrometido en la calma de mi alma; tienes razón, las palabras engañan, sin embargo no hadejado de resonar en mi mente cada verso que sus labios me pronunciaban, ¿Puede una palabra ser engañosa cuando la mirada revela pureza?; sagrado, sagrado, divino y lóbrego es para mi el amor.
Como uncrucificado a su cruz la noche nos vio clavados, creando un universo diferente, inmunes a toda realidad punzante en nuestra intimidad armónica y sobrenatural, y entonces ella me declaró que sentíairracional y profundamente lo que por nadie había sentido y yo dominado por su dulzura deje en su voluntad mi vida como un frágil cristal. ¡Oh dime tú!, dime tú en que he fallado, se la han llevadosus padres y no he recibido carta alguna de ella, la he encontrado en la Feria latino, la fiesta que se celebraba en el monte Albano, ha volteado a mirarme y se ha marchado.
¿Cómo se desata el alma asus pestañas, si son la puerta a el mundo al que quiero pertenecer?, quisiera mirarme y sentirme mío, pero le pertenezco al misterio dulce de sus pupilas, desearía desconocer el universo que juntoscreamos y serle indiferente, como con el aire que no reconocemos si nos roza el rostro, pero el dolor de su ausencia me recorre el cuerpo como si cada órgano anhelara el oxigeno que de sus fosas mecompartía y estalla en mis ojos húmedos, salados. En este juego, querido abuelo, soy el jugador perdedor, he abandonado mi potencia como jugador por el delirio de su cuerpo; este juego misterioso ha...